domingo, 17 de mayo de 2009

Crítica: Outlander

En estos tiempos que corren, dónde el cine se alimenta incansablemente de la industria del cómic y donde los remakes ya son una plaga, es de agradecer que saquen productos como "Outlander", que aunque viene a ser una especie de versión moderna de la leyenda de "Beowulf", intenta ofrecer algo nuevo, o al menos diferente en la cartelera. La película se presentaba con un argumento de lo más atrayente: un alienígena que se estrella con su nave espacial en la Noruega vikinga y que encima venía acompañado de un monstruo de otro planeta. Por lo que teníamos vikingos y alienígenas, una combinación de ingredientes que pintaba realmente bien. El resultado, una película muy entretenida. La cinta no engaña ni pretende engañar a nadie, es totalmente honesta y proporciona lo que ofrece: vikingos greñudos y a un pedazo de monstruo alienígena que pretende matar a todo lo que se cruce en su camino, así que ya teníamos mucha diversión, hidromiel y algunas dosis de sangre.


El director y co-guionista Howard McCain combina ciencia ficción y aventuras, el un film influenciado por clásicos como "Alien", "Depredador","El Guerrero Número 13", "Beowulf" con unas localizaciones de lujo, unos efectos especiales mejores que otros y un potente reparto. Como guerrero venido de las estrellas tenemos a James Caviezel un actor muy conocido por ser el Jesucristo de "La Pasión de Cristo" de Mel Gibson. Por otra parte, tenemos a la heroína de la película, Freya, interpretada por Sophia Myles ("Underworld", "Tristan e Isolda"),  a Jack Huston ("Cabeza de Muerte") dando vida a tal vez el vikingo más metrosexual de toda Noruega. Como plato fuerte, veremos a John Hurt en el papel del rey de los vikingos, y una aparición casi testimonial de Ron Perlman. El monstruo del film vendría a ser un híbrido entre el Alien de Ridley Scott (salvando un poco las distancias) y un dragón,  desgraciadamente, se nota que el alienígena esta realizado digitalmente y desentona un poco con el buen nivel general que ofrece la película en los aspectos visuales. A parte de esta criatura, también resultan destacables los flashbacks que veremos en la cinta, con una estética retrofuturista muy interesante (con claras influencias de "Gears of War") y las batallas entre los vikingos y el monstruo, en las que no se escatima en sangre. La ambientación, el vestuario y las localizaciones, son correctas, transportándonos a la era de los vikingos.

"Outlander" es una divertida película, que ofrece acción, aventuras, ciencia ficción, monstruos, vikingos, fantasía e incluso dosis de humor y amor (aunque esté metido con calzador), en contra tiene los algunos efectos visuales, un desarrollo previsible y unos diálogos algo flojos. No obstante es entretenida, así que, en este aspecto, la película ha cumplido.


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