jueves, 31 de mayo de 2012

"Branded", que no te coman el coco con la publicidad

Esta semana estaba siendo bastante floja en lo que a tráilers se refiere, pero eso ha sido hasta esta noche, momento en el que se ha presentado de forma inesperada el tráiler oficial de “Branded”, un thriller de ciencia ficción que llega desde Rusia y que esta dirigido a cuatro manos por Jamie Bradshaw y Alexander Doulerain, antiguos ejecutivos de marketing. El argumento de “Branded” (también conocida como “Moscow 2017” y "The Mad Cow”) no puede ser más sugerente, las imágenes que se despliegan en el avance de algo más de dos minutos son realmente espectaculares, y además entre su reparto nos encontramos con el actor sueco Max Von Sydow (“El Exorcista”).

¿Recordáis aquella maravillosa cinta titulada “Están Vivos” (“They Live”) que dirigió John Carpenter en 1988? Pues os diré que “Branded” guarda bastantes similitudes con ella (y eso es algo estupendo), la cinta nos lleva a un futuro no muy lejano en donde una misteriosa corporación activa un código genético en el ser humano con el que comienza a dominar a la población a través de las marcas publicitarias, ¿cómo lo veis?.

“Branded” se estrenará el 7 de septiembre en los cines de Rusia y USA con calificación R. Una última cosa, bajo el argumento os dejo el sorprendente tráiler, pero os advierto que en él se encuentran insertados nada más y nada menos que 97 códigos QR, algunos bien escondidos y otros a plena vista. Sin duda una buena campaña de publicidad viral para el film, ¿Os apetece una burguer XXL con doble de queso?.

Branded es un oscuro y alucinante viaje en una sociedad distópica, donde las marcas corporativas han desencadenado una monstruosa conspiración global para entrar en las mentes de los ciudadanos y mantenerlos desilusionados, dependientes y pasivos. En el futuro, una misteriosa corporación activa un código genético en el ser humano por el que comienza a dominar a la población a través de marcas publicitarias que se entremezclan con el individuo. Un hombre llamado Misha (Ed Stoppard), tratará de desvelar la verdad al mundo desencadenando una épica batalla entre la masa social y las fuerzas que realmente controlan nuestro mundo...

Crítica: Asylum Blackout

En 1982 recibimos una película de miedo bastante cool llamada “Alone in the Dark”. Donde gozábamos de actores como Jack Palance, Donald Pleasance y Martin Landau, y esta película se basaba en un desafortunado psiquiatra que tenía que defender su hogar de unos lunáticos que se habían escapado. Es una peli chula aunque pasada para estos días, pero ya en su momento cuando la vi, que no era 1982 porque no había nacido; pensé que era muy entretenida pero que la idea en si era bastante estúpida. ¿Por qué dejas que todo el sistema de seguridad de un asilo vaya por electricidad? Estás ahí como esperando que una tormenta se lo cargue todo y la masacre y tu manicomio sean uno. Parece ser que 30 años después, aquí estamos de nuevo con esta idea. Con la nueva producción franco-belga-americana, “Asylum Blackout”, damos buena cuenta de ello.

martes, 29 de mayo de 2012

Crítica: The Aggression Scale

Para digerir con un mínimo de garantías la crítica de la película que nos ocupa, que no es otra que "The Aggression Scale" del amiguete Steven C. Miller, cineasta desconcertante donde los haya, después de elevar al máximo exponente aquello de una de cal y una de arena o lo que es lo mismo, dirigir algo tan sumamente interesante como “Automaton Transfussion” y luego algo tan potencialmente penable, como “Scream of the Banshee” es necesario que tengamos claros los dos conceptos que a continuación expongo: El primero, el de la denominada escala de agresión, que no es otra cosa que el test utilizado en psiquiatría para medir la agresividad de un individuo, en respuesta al perjuicio, ya sea físico o psicológico, causado por otros. El segundo, uno que de seguro os suena más y que en un momento u otro de vuestra etapa estudiantil, os preguntasteis si podríais dar utilidad prática en algún momento de vuestras miserables vidas, este no es otro que la denominada regla de tres. Y profundizaré definiendo el término como la forma de resolver problemas de proporcionalidad entre tres o más valores conocidos y una incógnita. En ella, se establece una relación de linealidad entre los valores involucrados. Para entender esto último y pensando siempre, SIEMPRE, en los más cortitos de la clase, me he permitido la licencia de poneros un pequeño ejemplo gráfico para resolver un problema cualquiera, que se yo... por ejemplo: si un estudiante normal de secundaria, ha tenido acercamiento físico durante los cuatro años que dura dicho periodo por media, con 1,7 estudiantes del sexo contrario, ¿cuantas estudiantes de ese mismo sexo han confraternizado en distancias cortas con el Rector en esa misma franja de tiempo? La fórmula será la siguiente:

Y para hallar la respuesta tendremos que, o bien preguntarle al Rector (quien no contestará pues es extremadamente modesto), o bien aplicar dicha fómula, es decir, multiplicar al atractivo Rector por las ardientes jovencitas y dividir el resultado por el estudiante bobalicón.

Bien, con estos dos conceptos básicos claros, podemos proseguir con la película del señor Miller. Pero antes, es necesario un nuevo ejercicio mental, una pequeña inmersión en nuestra memoria, en nuestros recuerdos, en lo más profundo de nuestro subconsciente, cuando aun éramos, niños. Si amigos, los niños, ese repulsivo estadio del ser humano por el que todos y todas hemos pasado mas no nos guste reconocerlo. ¿Que hacíamos para divertirnos allá por los 90? Pues yo que se y que se yo, ver los dibujos animados de la tele, jugar con el Scalextric, proyectar pornografía barata en el super cinexin con una mano mientras con la otra..., leer tebeos, comernos los mocos, comernos los mocos de los demás, no se, todo ese tipo de cosas... de acuerdo. ¿Que hacen ahora los niños de esa misma edad para divertirse? Pegar a sus profesores, ridiculizarlos, drogarse en los parques, robar en los supermercados, robar en casa, embarazar a las compañeras de clase, asesinar a un tercio de la población mundial online con la Xbox360 mientras actualizan a cada segundo el diccionario de tacos y palabras malsonantes de la real academia de la lengua española, maldecir a todos los muertos de los seguidores del equipo de fútbol contrario, ver Gran Hermano, salir en Hermano Mayor, fumar, beber, matar, violar, molestar al prójimo, reírse de los demás, hacer la iniciación para entrar en bandas latinas, etc... correcto. Es ahora cuando tenemos que echar mano de la jodida regla de tres y utilizar la siguiente fómula: Si en el año 1990, de la combinación entre los elementos casa+niño+delincuentes, se parió “Solo en Casa” en el año 2012 con idéntica combinación, se obtendrá... fácil, se obtendrá “The Aggression Scale”.

Y es que la película de Steven C. Miller es una actualización del clásico de la comedia dirigido en 1990 por Chris Columbus. Esta, es la mejor y más rápida manera de definir la cinta que nos ocupa. Variaciones, haberlas, hailas, claro está pues hablamos de actualización, influencia si queréis, no de remake. En la historia de Columbus, el niño era olvidado por sus padres (normal) cuando estos se iban de viaje. Luego aparecían los dos delincuentes de turno en la casa y bueno, resultaba ser que la susodicha criatura (Macaulay Culkin), tenía más peligro que Mcgyver en una ferretería y se las hacía pasar putas. Hoy, en “The Aggression Scale” la cosa va de un grupo de asesinos a sueldo que son contratados por un pez gordo de la mafia que acaba de salir de la cárcel bajo fianza, para que encuentren el dinero que alguien le robó cuando fue aprisionado por la ley y de paso, se carguen a todo bicho viviente que tuviera algún tipo de relación con el asunto. El rastro les llevará hasta la bonita y nueva casita de la típica familia feliz desestructurada de las pelis americanas, en ella, a parte del matrimonio, dos hermanastros adolescentes, impertinente ella, callado él.

Ahora, tan solo nos queda meter en la batidora todos los géneros cinéfilos que aborda la obra, con mayor o menor acierto, tales como son el survival, el thriller de acción, el “home invasion” el rape&revenge (aunque en realidad aquí no violan a nadie) y la comedia familiar (porque lo siento, pero quien me diga a mi, que esto no tiene algo de comedia, miente como un bellaco por no decir como un rufián), darle al botón del aparatejo, servirlo en una jarra y dejarlo enfriar en la nevera a gusto, para degustarlo a posteriori en una de esas calurosas tardes de verano en las que uno no tiene muchas ganas de comerse las pocas neuronas que le quedan y prefiere un bocadito ligero de pseudo explotation “violentoso” de guión plano y previsible que se limita a mala gente armada hasta los dientes persiguiendo a inocentes jovenzuelos por un puñado de dólares. Pues eso, “Solo en Casa” versión 2012.

Una historia simplona y tópica sirve como escusa de saldo para enfrentar al grupo de criminales con la pareja protagonista. Como he dicho, una chica y un chaval, hermanastros que no se llevan precisamente bien y que ahora deberán colaborar para salvar sus vidas. La chica no tiene mucha importancia en la historia, tan solo es el aliño. La lechuga la maneja el mocoso. Un angelote de pelo dorado y pocas palabras que por lo que se ve, tiene la escala de agresión de las narices por las nubes y que además, es un experto en toda clase de técnicas de supervivencia. Es cuando el nene entra en acción, cuando descubrimos que la cinta es en realidad una comedia burra disfrazada de thriller, porque vamos, a este niño lo sueltas desnudo en la jungla de “Depredador” y sale por su propio pie a las pocas horas con la cabeza del predator como llavero. Aunque, en defensa de la escasa credibilidad de la historia, decir que los matones no son precisamente un prodigio de inteligencia. Ya se sabe que dos no pelean si uno no quiere.

A esto, añadid: Persecuciones, acciones estúpidas de personajes aun más estúpidos, trampas imposibles (ríete tu de aquel aficionado de “The Collector”), lazos afectivos que se refuerzan por la tragedia, altas dosis de violencia, aceptable vertimiento de hemogoblina, algún que otro gag resultón y la omnipresencia de una terrorífica imagen en nuestra cabeza que cobra más y más fuerza a cada secuencia de la película, la del niño de “Solo en Casa” apalizado en una oscura esquina de nuestro barrio una noche lluviosa por un grupo de críos de 15 años para robarle el iphone y las bambas de marca. Luego lo violan repetidas veces y le prenden fuego. Como arde el hijo puta.... como arde. Y ese olor a carne quemada que se nos cuela por los orificios nasales casi sin quererlo, recordándonos a cada ráfaga de aroma, las miserias de una generación de niños, la actual, que nunca fueron tal cosa.

Dejando de lado la cuestionable seriedad del filme, es indudable su calidad técnica, con una fotografía generosamente colorista que realza todas las secuencias hasta el extremo de hacer que estas, parezcan traspasar los límites físicos de la pantalla, dotando al filme de un aspecto muy atractivo y de paso, de ese toque de personalidad del que por ejemplo, carece su desarrollo, y con una dirección detrás de las cámaras, fresca y plagada de pequeños detalles, muy superior a lo que se suele encontrar en este tipo de producciones de serie B. Las interpretaciones, por lo general, también acompañan, destacar sobretodo a la joven Fabianne Therese, actriz que da vida a Lauren, candidata desde ya, al premio de la Scream Queen adolescente del año. Su contrapunto masculino, Ryan Hartwig (a quien veremos también en la próxima “The Thompsons”) y quien pese a no mediar palabra en toda la película, también estimula de forma correcta nuestra zona empática a lo largo del metraje y los malos... bueno, los malos son bastante cutres, aquí no vamos a escatimar en verdades. Destacar entre ellos, al grandullón Derek Mears, quien por fin da la cara después de meterse en las carnes de gente como Jason Voorhes en el remake de “Viernes 13” o de uno de los depredadores de “Predators”. Sin pasar por alto, por supuesto, la presencia del siempre agradable de ver (a nivel interpretativo), Ray Wise.

La imagen: Dudo entre Fabianne Therese dándose una ducha o Ray Wise mirando por la ventana de su auto caravana en las postrimerías del filme. Dudo.

La estupidez: SPOILER el padre de familia encañonando por la nuca al tipo que acaba de asesinar a su esposa a sangre fría y diciéndole que tire el arma, que no quiere problemas FIN SPOILER

El personaje: El asesino minusválido (y lo digo por enano, no por calvo). Buen ejemplo de que lo del enchufe laboral, no solo se da en España.

La frase: Cualquiera de Ryan Hartwig.

Tenían razón nuestros profesores y valió la pena empollarse la regla de tres: Su acabado visual y la posibilidad de disfrutar de un clásico como “Solo en Casa” en clave de actualidad.

Nuestro peores augurios de adolescencia son una realidad, la puta regla no vale para nada: La nula originalidad tanto de planteamiento como de desarrollo y tener un hijo adolescente que posiblemente nos termine, robando, pegando y quien sabe, violando.

lunes, 28 de mayo de 2012

Crítica: H2Odio

Estimado Alex Infascelli,

Me he decidido a escribirle con la humilde esperanza de que me pueda contestar y así poder sacar algo en claro de su película H2Odio. Soy consciente de que la rodó hace ya unos seis añitos y no es lo mismo preguntarle ahora, que cuando la tenía fresca y cristalina como el agua, pero es que yo la he visto ahora... Le decía que necesito un poco de ayuda porque yo comencé a ver su película con toda la ilusión de mundo, el título me pareció cojonudo, perdón, quería decir excelente, y me tiré de cabeza a por ella, pues lo único que sabía de la película, es que ahí dentro encontraría mujeres y agua, y bueno, yo soy mujer y soy piscis, así que creí que podría conectar muy bien con lo que usted nos iba a contar.

domingo, 27 de mayo de 2012

Crítica: The Man From Nowhere

Todos conocemos, o hemos conocido alguna vez, a una de esas personas que cuando habla, cuando explica algo, provoca que prestemos un especial interés y atención en escucharla, incluso aunque no nos interese lo más mínimo el tema del que esté hablando. Quizás sea la forma con la que engalanan lo que cuentan, intercalando chistes o dejando caer coletillas de Muchachada Nui; o tal sea vez el sonido de sus voces. Te pueden hablar del proceso de fabricación de los cordones de las zapatillas o contar una historia que ya hayas escuchado cientos de veces, y aun así, atiendes como si fuera tu propio médico leyéndote los resultados de tu análisis. “Tiene magnetismo…” suelen decir. Algunos de los que poseen esta habilidad acaban en la tele; otros, los que más, de comerciales de productos informáticos.

"Deranged", suicidios parasitarios en Corea del Sur

Dentro del mercado del 65º Festival de Cannes se está promocionando “Deranged” (“Trastornados”), la nueva película del extravagante director y guionista surcoreano Park Jung-Woo (“Big Bang”, 2007). La cinta narra la historia de una epidemia de propagación rápida que se transmite por medio de unos parásitos que se introducen en el interior de la gente y que les termina controlando el cerebro, obsesionándolos con el agua hasta llevarlos a la muerte.

El reparto esta formado por Kim Myung-Min (“Pacemaker”), Moon Jung-Hee, Kim Dong-Wan y Lee Ha-Nui. "Deranged", cuyo título original es “Yeongasi”, llegará a los cines de Corea del Sur el próximo 12 de Julio. Abajo os dejo el impactante tráiler, que ya os digo que si os molan las películas sobre infectados y catástrofes, véase por ejemplo “El Incidente” (M. Night Shyamalan, 2008), no os dejará indiferentes.

Jae-Hyuk es un hombre normal y corriente de unos 40 años, que trabaja como vendedor de suministros médicos, un trabajo estresante por la presión continua a la que está sometido. Su hermano Jae-pil es un detective que no está tan interesado en la seguridad pública y que pasa la mayor parte de su tiempo obsesionado con el mercado de valores.

El descubrimiento de una serie de cuerpos flotando en un río desata la histeria en toda Corea del Sur. El comisionado de la policía se altera al ver imágenes que emite una cadena de televisión en la que se pueden ver a personas saltando desde puentes y ahogándose en el agua como si estuvieran poseídos, totalmente sin control. El tiempo pasa y cientos de casos similares se presentan dejando a los científicos perplejos en cuanto a la causa de las muertes. El gobierno declara una emergencia nacional. Jae-pil se une a la investigación y descubrirá que hay una conspiración detrás del brote. Mientras tanto, la esposa de Jae-Hyuk y los niños están mostrando los mismos síntomas que las víctimas, lo que lleva a una búsqueda frenética de un antidoto.

 

sábado, 26 de mayo de 2012

"Torture Chamber", los niños del infierno quieren jugar

Precisamente ayer, en la noticia de “The Possession”, os comentaba que el día que hiciesen una película sobre un niño poseído revolucionaría el género de las películas sobre posesos, pues dicho y hecho. Dante Tomaselli dirige y escribe “Torture Chamber”, una película de terror con bastantes aires retro, que se ha hecho un poco de esperar desde que salieron las primeras imágenes, y que nos presenta a un chico de 13 años que se encuentra poseído por el demonio, y que tras escapar del manicomio donde se encontraba encerrado y esconderse en las mazmorras de un antiguo castillo, se dedicará a secuestrar y a torturar hasta la muerte a todas las personas que se crucen en su camino, para conseguirlo contará con la ayuda de sus esbirros, un grupo de tétricos niños que parece que acaban de salir del mismísimo infierno.

Parece que “Torture Chamber” es la propuesta más atractiva que surge de la mente de Dante Tomaselli, un cineasta aficionado al terror, que ya ha realizado otras películas del género: "Satan's Playground", “Horror” o “Desecration”, aunque todas ellas bastante fallidas. Entre el reparto de “Torture Chamber” nos encontraremos a Vincent Pastore (“Los Soprano”), Christie Sanford (“Desecration”), Lynn Lowry (“The Crazies”) y Ron Millkie (“Viernes 13”). Se espera que la película haga el correspondiente circuito de festivales durante éste 2012, abajo os espera el tráiler, que por cierto pinta muy bien.

Terror alucinatorio sobre la unión impía entre una madre y sus dos hijos. Un sacerdote católico, que siempre se ha dedicado a ayudar a la familia, trata de curar al hermano más joven que se encuentra desquiciado, pero Jimmy Morgan de 13 años de edad, está poseído por un mal demasiado poderoso para poder ser exorcizado por ninguna religión. Después de escapar de la institución mental donde fue ingresado, Jimmy ha vuelto para vengarse y lo hace junto a un ejército de siniestros niños que siguen cada uno de sus deseos asesinos. La ciudad de Smithville temblará de miedo cuando los jóvenes comiencen a atacar y secuestrar a sus residentes, tanto inocentes como culpables, todos por por igual. Arrastrando a sus víctimas a un castillo abandonado y sometiéndolos a tormentos en lo profundo de sus túneles subterráneos. Los que descubren el terrible secreto detrás de las desapariciones y las muertes no logran vivir lo suficiente para contarlo. Todos se enfrentarán a sus destinos en la Cámara de Tortura...

Crítica: Tesis

Siempre he creído que Alejandro Amenábar es un tipo muy listo. Con el tiempo se ha podido comprobar que efectivamente así es.

Tras sus cortometrajes ‘Himenóptero’ (Ídem; 1992) y ‘Luna’ (Ídem, 1995), Amenábar logró llamar la atención del productor, guionista y director José Luis Cuerda, el cual le produjo su primer largometraje, la notable ‘Tesis’ (Ídem, 1996).

viernes, 25 de mayo de 2012

"The Possession", la última posesión de Sam Raimi

Parece que últimamente no se estrujan demasiado el cerebro a la hora de poner los títulos de las películas, pues pasamos de una de casas encantadas como “The Apparition” a una de posesiones como es “The Possession”. ¿De que va esta? Pues de la posesión de una niña, que original no sería (el día que pongan a un niño poseso revolucionarán el género), aunque esta vez dicen que la historia está supuestamente basada en hechos reales. La película está dirigida por el danés Ole Bornedal (“El Vigilante Nocturno”) y producida por Ghost Pictures, la compañía de Sam Raimi.

Según dicen los “modestos” de sus creadores, la película seguirá el estilo de “El Exorcista” y “El Resplandor”, y estará basada en unos hechos reales que ocurrieron después de que una familia comprara una antigua caja, una caja diseñada para contener un "dibbuk", un espíritu malvado del folklore judío atrapado en la caja. El guión viene firmado por Juliet Snowden y Stiles White, guionistas de “Señales del Futuro” o “Boogeyman”, y está protagonizado por Jeffrey Dean Morgan (“Watchmen”, “Supernatural”), Kyra Sedgwick (“Gamer”) y Natasha Calis. “The Possession”, que imagino que aquí la titularán “La Posesión”, tiene fecha de estreno en Estados Unidos para el 31 de agosto y bastante más tarde llegará a España, concretamente el 21 de diciembre.

Desde luego que últimamente no dejan de salir películas sobre posesiones, después de cintas como “The Last Exorcism”, “La Posesión de Emma Evans” y “El Rito”, continuamos la racha de posesiones infernales con “The Cloth” , “The Devil Inside” , “When the Lights Went Out”, “Lovely Molly” y la que nos ocupa.

Clyde (Dean Morgan) y Stephanie Brenek (Sedgwick) ven pocos motivos para alarmarse cuando su hija menor, Em, se obsesiona con una antigua caja de madera que compró en un mercadillo. Pero mientras el comportamiento de Em se vuelve más errático, la pareja empieza a temer la presencia de una fuerza maléfica en su propio hogar. Pronto descubrirán que la caja fue construida para contener un dibbuk, un terrible espíritu que posee y que finalmente devora a su huésped humano...

jueves, 24 de mayo de 2012

"The Apparition", Ashley Greene acosada por fantasmas

¿Te apetece una de casas encantadas?, ¿De experimentos paranormales?, ¿Eres Iker Jiménez? Pues aquí tienes el primer tráiler de “The Apparition”. Se trata de la primera película escrita y dirigida por Todd Lincoln, y es un film de terror sobrenatural que cuenta con un reparto lleno de rostros conocidos, especialmente entre el público adolescente: Ashley Greene (“Twilight”, “El Crepúsculo de Summer”), Tom Felton (“Harry Potter”, “El Origen del Planeta de los Simios”), Sebastian Stan (“Capitán América: El Primer Vengador”) o Julianna Guill (“Altitude”).

Viendo su recién estrenado tráiler me vienen varias películas a la cabeza, “Insidious”, “The Innkeepers” o incluso “Paranormal Activity”, pero esta cinta irá más allá y contará cómo el ser humano es capaz de crear e instigar a fuerzas y presencias paranormales a través del miedo. La película cuenta la historia que surge a causa de un experimento paranormal y que terminará con la casa de una joven pareja repleta de temibles entidades que se alimentan del miedo de sus inquilinos. Esperemos que por lo menos pueda explicarnos una historia de fantasmas un poco original y que la cinta no esté repleta de clichés, como suele ocurrir en estos casos.

“The Apparition” vendrá estrenada por Dark Castle a través de Warner Bros y se estrenará el próximo 24 de agosto en USA, para el resto del mundo aún no hay fechas de estreno.

Kelly (Greene) y Ben (Stan) son una joven pareja que, por error, invoca a una presencia extraña durante un experimento parapsicológico para la universidad. Una vez finalizado el experimento, la presencia les atormentará a todas horas y en todas partes, alimentándose de su miedo. La única persona que parece tener la solución al problema es Patrick (Felton), un experto en temas sobrenaturales , pero incluso con su ayuda puede que ya sea demasiado tarde para salvarse...

miércoles, 23 de mayo de 2012

Crítica: God Bless America

“Solo quiero matar a gente que merece morir. Sé que no es normal querer matar… pero ya no soy normal...”

Hace un calor infernal. Salgo de mi casa, al metro en hora punta, como cada jodida mañana. Tengo sueño, la noche anterior mis putos vecinos tuvieron el televisor puesto a toda pastilla hasta la madrugada. Llega el metro, la gente presiona para subirse los primeros, aunque algunos acaban de llegar. Una mujer gorda casi me aplasta para coger el único asiento libre que quedaba en el vagón, pienso: "mejor ibas andando y hacías algo de ejercicio". Hay tanta gente que me viene a la cabeza el puto Tetris. Alguien grita "viengo de la rumaniia, no tengo trabaijo, tengo dos hiiijos". Lo que faltaba, pienso en darle las señas de un amable conde que conozco y que vive por aquellas tierras de las que jamás debió salir, seguramente estaría encantado de acogerla en su morada. Me quedan aún seis paradas, sigo de pie. “Que Dios os beindiiiga”. El tipo de delante atraviesa su brazo para cogerse a la barandilla y dejar paso a la de los faldetorios, su sobaco sudado queda a la altura de mi cara. Asco. Me intento girar, es físicamente imposible, lo miro desafiante, no se inmuta, pienso que igual ha visto “Shame”, aparto rápidamente la mirada. Alguien cercano estornuda con todas sus fuerzas. Virus. Trato de aguantar la respiración, no lo consigo, me viene la imagen de Gwyneth Paltrow en “Contagion”. Quedan cuatro paradas. Suben un grupo de estudiantes, aunque por sus pintas también podrían dedicarse a la venta de estupefacientes en horario nocturno, tal vez eso es lo que llevan en sus mugrientas mochilas, recuerdo “Eden Lake”. Uno de ellos saca el móvil de su bolsillo del chándal, pone ¿música? a todo volumen, la gente mira, nadie dice nada, los jóvenes se ríen y parece que se sienten orgullosos de lo que hacen, la gorda se levanta, uno de ellos, discípulo de Cristiano Ronaldo, corre a sentarse, una vieja que está de pie desde hace un buen rato le mira, nadie dice nada, nadie se levanta. Rabia. Me gustaría matarlos, subo el volumen de mis auriculares hasta que casi me revienta los tímpanos, “Du, Du hast, du hast mich!”, saco una pistola de mi bolso y comienzo a disparar a los cabrones, la sangre salpica las paredes del metro, lo siento por quien le toque limpiarlo, veo volar un par de dientes de oro, al móvil de los cojones también le meto un tiro, la ¿música? deja de sonar, quito de en medio el cadáver de Ronaldo, tocarlo es desagradable, luego me lavaré bien las manos, pienso. Me quito los auriculares, mando a la vieja que se siente, me da las gracias y sonríe, le contesto "de nada" y le devuelvo la amable sonrisa. La gente aplaude. Me lo estoy imaginando, la ¿música? sigue sonando, el Ronaldo sigue sentado, la rumana pedigueñando, y la vieja sigue de pie, ninguna pieza del Tetris aplaude, yo me bajo. Frustración.

martes, 22 de mayo de 2012

"Antiviral", la nueva y apetecible carne Cronenberg

El pasado sábado, y acompañado de su padre, Brandon Cronenberg presentó su ópera prima, “Antiviral”, en el Festival de Cannes. Un debut que tuvo una acogida algo irregular, pero por lo general dejó buenas sensaciones. La película trata sobre el poder de la genética, y curiosamente en su debut, el hijo de David Cronenberg, continúa con el estilo que tenía su padre en sus inicios, las comparaciones serán inevitables, pues “Antiviral” es un thriller de ciencia ficción de lo más atractivo y alucinógeno.

La cinta nos sumerge en un mundo, que bien podría ser el nuestro en un futuro no tan lejano, en el que la adoración por las estrellas (los famosos, no los cuerpos celestes) se ha convertido en algo tan cotidiano y vital que se comercia con la genética de los ídolos, y donde incluso la gente paga por adquirir sus mismas enfermedades.

Una trama realmente original, enfermiza y llena de suspense, que se enfoca desde la perspectiva de Syd March (Caleb Landry Jones), una especie de científico y agente comercial que se gana la vida traficando con los virus y enfermedades que portan los ídolos del momento, un material por el que muchos fanáticos están dispuestos a pagar buenas cantidades.

“Antiviral” está protagonizada por Caleb Landry Jones (“X-Men: First Class”, “El Último Exorcismo”), Sarah Gadon (“The Moth Diaries”) y Malcolm McDowell (“Halloween: El Origen”, “Halloween 2”). Por mi parte, me parece estupendo que el hijo de David Cronenberg quiera seguir los pasos de su padre, de momento y ha juzgar por el fascinante clip presentación que tenéis abajo, la cosa promete. Todavía no cuenta con fecha de estreno en nuestro país, pero ya llegará.

Syd March, un joven empleado de una clínica obtiene un plus clonando y cultivando enfermedades y virus que portan las celebridades del momento y vendiéndolas al mejor postor, sus fans. Una comunión biológica a cambio de un módico precio. Además, Syd también provee de muestras de virus ilegales a grupos piratas que las roba de clínicas especializadas metiéndoselas en su propio cuerpo. Pero la obsesión de Syd por una super celebrity, Hannah Geist, le llevará a inyectarse el virus que ella padece. Pero todo se les escapará de las manos, y Syd terminará en una carrera a contrarreloj por encontrar una cura y salvar su vida.

"El Llanto", estreno del cortometraje de Saúl Gallego (2)

El proyecto del cortometraje "El Llanto" nace en la mente del joven director Saúl Gallego hace aproximadamente ocho años, cuando queda fascinado tras el visionado de la serie "Historias para no dormir" de Chicho Ibáñez Serrador.

Desde ese momento se propone escribir una historia de suspense de bajo presupuesto donde lo fundamental sea la historia y sus personajes. Su idea es simple pero atractiva, un personaje es perseguido por un extraño llanto de bebé. A partir de ahí y tras escribir varias versiones previas, es en septiembre de 2009 cuando Saúl se propone escribir enserio el grueso de lo que finalmente acabaría siendo el verdadero punto de partida de "El Llanto".

Tras acabar el rodaje de "De Tu Ventana a la Mía" a las órdenes de Paula Ortiz y "Road to Waken" de Pablo Aragües, Saúl finalmente se propone materializar su historia y por ello, empieza a reescribir su historia junto a Manu Palos.

Tras seis meses de reescrituras y replanteamientos de la trama, el guión, finalmente está listo y deciden presentarlo al I concurso del club de cine del CPA Salduie, lugar donde Saúl había finalizado Realización audiovisual pocos meses antes.

En Enero de 201l, el guión de "El Llanto" gana el certamen y consigue un premio por una cuantía de 4000 euros. Tras estudiar la viabilidad del proyecto debido a su enorme complejidad y recibir luz verde, se forman los diferentes equipos de trabajo.

Tras dos meses de dura preproducción, el rodaje arranca el 8 de mayo de 2011 y finaliza el 13 de mayo con el actor Néstor Arnas como protagonista. Con un reparto formado 100% por actores aragoneses donde tienen cabida jóvenes talentos como el de Laura Contreras, Saúl Blasco, Oscar Castro, Javier Ercilla, María Martinez y Martín Pascual, también hay lugar para actores consagrados dentro de la escena teatral aragonesa como Mariano Anós, Félix Martín, Alfonso Pablo y Carlos Fau. El rodaje se desarrolla gran parte en el hotel Tryp y también en la antigua escuela de artes de Zaragoza, lugar donde se construyen algunos de los mejores decorados del cortometraje.


Una vez acabado el rodaje y tras una larga postproducción de montaje, imagen y sobre todo, audio, "El Llanto" se estrenará el próximo sábado 26 de mayo en el Centro Musical y Artístico de Las Armas (Zaragoza) a las 20h. El director ha rodado "El Llanto" como si de cine de suspense clásico se tratase, cuidando y respetando tanto el lenguaje como la composición de planos, porque para Saúl, "El Llanto" no es un corto, sino una nueva historia para dormir…



Aprovecho la ocasión para darle mi más sincera enhorabuena a nuestro compañero Saúl, aka Norman Bates, te felicito y te deseo toda la suerte del mundo en nombre de todo el staff de Nido de Cuervos, que el estreno sea todo un éxito y...mucha mierda!. A continuación os dejo con un video reportaje que el programa de la Televisión de Aragón emitió sobre el rodaje del cortometraje. Saúl...eres todo un profesional.

lunes, 21 de mayo de 2012

Crítica: [REC] 2

Todos aquellos que hayáis visto la película de terror [REC] tendréis que confesar que es una de esas cintas de pavor real. Efectiva en el género de cámara a hombro y de tipo: zombi. Le dio un aire fresco al mundillo.

"Storage 24", ¿Qué eres, hijo de Satanás?

El británico Johannes Roberts, director de la controvertida “F”, regresa con “Storage 24”, un nuevo film de terror que cuenta la historia de un grupo de personas que se encontrarán atrapadas en el interior de un edificio de trasteros, después de que un avión militar se estrellase y dejase su contenido clasificado esparcido por todo Londres. El edificio de almacenaje se convertirá en una oscura trampa mortal en donde un insólito depredador irá dando caza a los que se encuentren en su interior.

Uno de los puntos más interesantes de “Storage 24” es que está protagonizada y escrita por Noel Clarke (“Doughouse”, “Heartless”), más conocido por algunos de nosotros como “Mickey” de la serie “Doctor Who”. Tras conocer el argumento podría decirse que la historia es una combinación entre “Attack of the Block”, “The Divide” y “Feast”, vale...de acuerdo, yo tampoco lo creo pero soñar es bonito, lo único que pido es que no se parezca en nada a “Skyline”, con eso ya me conformo.

La película se acaba de presentar en el Festival de Cannes, donde ya ha conseguido distribución en prácticamente toda Asia, Australia, Nueva Zelanda, Alemania, Escandinavia y obviamente el Reino Unido, y como siempre, España se quedará comiéndose los mocos. La película, comprada por Universal Pictures, se estrenará en los cines del Reino Unido el próximo 29 de Junio. Abajo tenéis el tráiler.

Londres es un caos. Un avión de carga se ha estrellado dejando su contenido altamente clasificado esparcido por toda la ciudad. Totalmente conscientes de que Londres se encuentra bloqueado, Charlie (Noel Clarke) y Shelley (Antonia Campbell-Hughes), y sus mejores amigos Mark (Colin O'Donoghue) y Nikki (Laura Haddock), se encuentran en el edificio de almacenamiento 24 (Storage 24), dividiendo sus pertenencias tras la reciente ruptura de la pareja. De repente, la alimentación se desconecta. Atrapados en un oscuro laberinto de pasillos interminables, un misterioso depredador les irá cazando uno a uno. En un lugar diseñado para mantener las cosas cerradas, ¿cómo salir?...

domingo, 20 de mayo de 2012

"Art House Massacre", fotografiando a la muerte


Desde Inglaterra nos llega “Art House Massacre”, una cinta independiente que se ha presentado en el mercado del Festival de Cannes y que dirige el debutante Steve Laurence. Se trata de un sangriento thriller de suspense, que nos mostrará lo que sucede cuando el arte se nutre de la muerte.

“Art House Massacre” cuenta la intensa historia de Liz y Ben, un matrimonio que pasa por un mal momento y que apenas se dirige la palabra. Todo empeorará cuando Liz decide ir a una sesión fotográfica sin contárselo a su pareja, una sesión de fotos llevada a cabo por un asesino psicópata con pretensiones artísticas, cuya obsesión es extirpar órganos y fotografía a la muerte. Cuando Ben se de cuenta que desconoce el paradero de su esposa, y después de tener un mal presentimiento tras una llamada telefónica, comenzará una carrera a contrarreloj para intentar encontrarla con vida.

La película, underground donde las haya, ha presentado un tráiler que no resulta tan amateur como puede parecer (especialmente si nos guiamos por el horrible póster con el que cuenta la película), de momento no se conocen fechas, de hecho la información sobre la película es bastante escasa, pero es probable que alguna distribuidora la termine comprando en Cannes.

Pasando por un mal momento de su relación y tras una traumática experiencia, Liz (Emily Baxter) decide volver ha posar como modelo en una sesión fotográfica para ganar algo de dinero extra que llevar a casa. Sin apenas mediar palabra con su marido, Ben (Martin Lawrence) no tiene ni idea de donde puede haber ido Liz, quien sin saberlo se ha metido de cabeza en la boca del lobo, en la aislada casa de un siniestro fotógrafo (Ryan Elliott), con una obsesión oscura y retorcida, fotografiar la muerte. ¿Podrá Ben encontrar a Liz antes de que el artista lleve su obra a cabo?, ¿O Liz ya se habrá convertido en una nueva víctima de la masacre de la casa del arte?...

sábado, 19 de mayo de 2012

"The Thompsons", la familia unida jamás será vencida


Pero que ganas tenía de que saliera el tráiler de “The Thompsons” y resulta que en el Festival De Cannes lo acaba de presentar, si es que en Cannes están que tiran la casa por la ventana. Como ya sabéis se trata de la secuela de la película de “The Hamiltons” de The Butcher Brothers (“The Violent Kind”), tras ese apodo se encuentran los nombres de Phil Flores y Mitchell Altieri, y ellos mismos vuelven a dirigir y escribir la secuela, ésta vez más salvaje y más sangrienta que su predecesora.

“The Thompsons: The Hamiltons 2” también volverá a contar con el reparto original que dio vida a la entrañable familia en su primera entrega (y habiendo visto “The Violent Kind”, se podría hablar del reparto fetiche de los "hermanos carniceros"), pero también habrá un recién llegado, el actor Ryan Hartwig que dará vida al joven "Lenny", el benjamín de la familia. Imagino que a estas alturas de la vida, no habrá nadie que no haya visto “The Hamiltons”, o al menos, que no se haya enterado del oscuro secreto que esconde esta singular familia, pero si eres un bicho raro y aún no te has enterado y piensas verla algún día, deja de leer o te vas a comer un buen spoiler.

Los Hamilton (“The Hamiltons”) narraba la historia de una familia que se encontraba destruida tras la muerte de sus padres, una familia de hermanos huérfanos aparentemente normal, que se encontraba integrada en una pequeña comunidad de los suburbios, pero los Hamilton no eran precisamente lo que se conoce como personas normales, sino una familia de vampiros psicópatas que además se alejaban bastante de la tradicional figura romántica que suele esconderse bajo los afilados dientes. El nuevo film continúa relatando la historia de esta particular familia, la cual termina huyendo a Londres, se cambia de nombre, y además realiza un pacto para abandonar sus hábitos asesinos más sangrientos, pero su situación se complicará cuando todo indique que en el barrio se encuentra otra familia de vampiros sedientos de sangre.

Si hablamos de fechas de estreno poco hay que decir, de momento se ha presentado en el mercado de Cannes y está por ver que sea lanzada durante este año o el que viene. Para ir abriendo boca, más abajo podéis contemplar el intenso tráiler, pero os advierto que si os gustan las sorpresas, mejor que paséis de leer la sinopsis y de ver el tráiler, en mi opinión, ambos cuentan demasiado, avisados quedáis.

Un baño de sangre en una gasolinera en el desierto provoca que los Hamilton tenga que huir rápidamente de los Estados Unidos. Finalmente resurgirán en el Reino Unido bajo una nueva identidad, Los Thompson. Pero todo cambia de manera drástica, cuando comienzan a sucederse una serie de asesinatos en la zona y la policía informe que el asesino drena la sangre de sus víctimas. Los Thompson empezarán a sospechar que alguno de sus miembros ha roto el pacto que tienen de no atacar a personas dentro de su propia ciudad…. ¿o acaso es posible que exista otra familia de vampiros en la zona?. Desesperados por encontrar protección en un país desconocido, los Thompson buscarán ayuda en los escondrijos del metro, donde se rumorea que hay vampiros benévolos. Pero la sangre ya se ha derramado, y la batalla entre los dos clanes de chupasangres será inevitable....

viernes, 18 de mayo de 2012

Crítica: Dark City

Hablar de Alex Proyas, es hablar de un solo de guitarra partiéndonos en dos a la luz de la luna. Este australiano nacido en Egipto y de padres griegos, es culpable de muchas cosas, de entrada y por poner un ejemplo banal a modo personal, de que en mi armario uno solo pueda encontrar ropa negra. Y es que Proyas, adapta a la gran pantalla en 1992, el cómic de James O´bar “The Crow” (“El Cuervo”), película que terminaría influenciando a toda una generación y que con el paso de los años se convertiría en pieza de culto del cine fantástico pese a que en su momento, no gozó de las simpatías del núcleo duro de seguidores del cómic original y que, tristemente, siempre será recordada por la desafortunada muerte durante el rodaje de su actor principal, Brandon Lee.

6 años después de inmortalizar la venganza de Eric Draven y ya con todos aquellos adolescentes reconvertidos al goticismo algo más creciditos, el australiano pone sobre la mesa su nueva obra, esperada por muchos como agua de Mayo, un thriller de ciencia ficción de título: “Dark City”, cinta enormemente perjudicada en su día por una nefasta distribución comercial por parte de New Line Cinema, condenándola a un inmerecido anonimato que la hizo pasar de puntillas por las salas de nuestro país. Sobre ella no comentaremos mucho ahora, pues los mas avispados ya habrán discernido del título “Crítica: Dark City”, que lo haremos con un poquito más de profundidad unas líneas mas abajo.

En 2004, Proyas se casca una nueva adaptación, esta vez de la obra literaria homónima, “Yo, Robot” de Isaac Asimov, superproducción con el popular Will Smith al frente que tampoco terminó de convencer a los seguidores de Asimov, lo cual, personalmente me suda bastante la polla porque yo (que a este señor solo lo conozco de oídas), flipé como un maldito gorrino revolcándose entre la mierda de origen palomitero excretada por todos aquellos que se acercaron en masa a calentar butaca en el cine. Una emotiva epopeya épica de ciencia ficción sobre un futuro distópico donde máquinas y hombres convivían en (supuesta) harmonía y que seguía profundizando en el mismo concepto de su anterior film, el alma, aquello que nos hace humanos.

Sería en 2009 cuando Proyas, ya con la vitola en el brazo de cineasta de culto, se casca la apocalíptica y a todas luces decepcionante “Knowing” (“Señales del Futuro”), film ni mucho menos acorde con la calidad del resto de su filmografía, menos personal y demasiado enfocado al gran público (o taquilla) con un ya decadente al frente, Nicholas Cage, en lo que venía a ser una actualización del mito bíblico de el arca de Noé en clave de ciencia ficción que no terminó de gustar a nadie, a mi, el primero.

“Al principio, había oscuridad, luego llegaron los ocultos. Eran una raza tan vieja, como el tiempo, habían llegado a dominar la última tecnología, la habilidad de cambiar la realidad física solo con su voluntad. Llamaron a esa habilidad, sintonización.”

Todos recordamos ese plano inicial de “El Cuervo”, con nuestro estimado congénere sobrevolando una siniestra ciudad en llamas al son de la cálida voz de Sarah, grabando ésta, incandescentes frases para el recuerdo en lo más profundo de nuestra oscuridad. Muchos crecimos EN aquella ciudad. Muchos crecimos CON aquella ciudad. Muchos crecimos POR aquella ciudad. Muchos morimos, para luego RENACER en aquella ciudad. Aquella ciudad estaba muerta. Aquella ciudad tan solo albergaba muerte. Aquella ciudad era una oda a la muerte y a todo aquello que esta siempre ha representado, representa y representará. Pasado, presente y futuro. El dolor, la pérdida, el vacío, la soledad. Es curioso pues, como Proyas, desgarra la tierra para agarrar los cimientos de su propia creación con sus manos desnudas, ensangrentadas y le da la vuelta completamente poniéndola del revés para volver a clavarla con firmeza, con precisión en el mismo lugar. Morir y renacer. La ciudad sigue siendo igual de siniestra, igual de oscura, pero es diferente, algo ha cambiado, la muerte se ha marchado. Y es que si los padres poseen el don de otorgar la vida, Proyas aquí lo hace y no porque yo lo diga, mas por que esta ciudad está viva.

La ciudad de “Dark City”, obra de arte concebida por Richard Hobbs, es un escenario macabro, pero orgánico, interactivo, siniestro ecosistema en constante ebullición, frenesí de insignificantes vidas que se apelotonan jugando a vivir en una oxidada y decrépita casa de muñecas, maleable como el hierro en la forja a voluntad (y al son de la grandiosa banda sonora compuesta por Trevor Jones) de una mente superior, de una inteligencia que se nos escapa y que pese a su grandeza, a su infinito conocimiento, a su sofisticada tecnología, es incapaz de comprender los entresijos, los secretos de la mente humana, de hallar las respuestas que necesitan para mitigar el dolor de su propia decadencia mientras nos observa con curiosidad extrema, nos analiza cual ratas de laboratorio dentro de un laberinto bajo la intensa luz de un flexo.

Desconociendo que, lo que nos hace humanos, lo que buscan de forma desesperada y se les escurre de las manos, lo que nos otorga la tan ansiada individualidad, no se encuentra en nuestra mente, sino en nuestra alma, eh ahí el nexo.

Sueño. Detestan la humedad y con ella, paradojas, todo comienza. En una sucia habitación de hotel, bajo el hipnótico movimiento de una vieja lámpara, el agua rebosa los límites de la bañera, de la consciencia, ni rastro de la sapienza. Nuestro hombre, desconocido para nosotros, desconocido para él mismo, despierta de su húmedo sueño y se incorpora, desnudo, vacío, tan solo acompañado por su reflejo en un espejo, el reflejo de un desconocido. Duda, cábala, lo intenta al menos, se viste. Cae la pecera, agoniza el pez. Se apiada, lo rescata, lo salva. Recuerdos. El sol, la playa, el mar. Suena el teléfono. Una voz, un faro en la oscuridad. “Van a ir a buscarle, debe, marcharse ahora” le dice. Se lo explica TODO. Una revelación. Siniestra. El cuerpo desnudo de una mujer, sangre, muerte, muerta. Un cuchillo manchado de sangre. ¿Quién eres? Nos preguntamos. ¿Eres tu el asesino? Ya veremos. Ya veréis (para ser más preciso), si acaso aun no habéis visto.

Una llave, una maleta, unas iniciales. El desconocido da un salto de fe y se enfrenta a la infinidad del vacío, hace caso a la voz que se esconde tras la desconcertante llamada, cuando no tienes nada, te aferras a lo que sea, a lo que puedas. Abandona la habitación. Era cierto, ellos llegan, tres siniestras (también) figuras, pero tarde. Ya se ha marchado, solo queda el pez, ajeno a todo. Feliz. Baja al vestíbulo del hotel, todos duermen. Todos. De repente, todos despiertan. Todos. El tipo de recepción le dice que debe dinero, que ya lleva tres semanas hospedado. ¿Tres semanas? Se extraña el extraño. Sale del hotel, elimina las pruebas. Belleza. Una canción. Sensualidad. Un nombre. El eco de un recuerdo. Señor J, algo… Murdoch. Una cartera olvidada le rescata (en parte) del olvido. La desea, la necesita, la quiere. Sintoniza. SINToniza. ¿SINTONIZA? Una prostituta, le rescata (y van dos) de la policía. La cuestión: ¿Salvadora, víctima, ambas?

Estos son a grandes rasgos (en lenguaje chanante), los primeros 12:23 minutos de “Dark City”, ahora si, película que nos ocupa. ¿Un género? Vaya, me gusta que me hagas esta pregunta, pues no tengo respuesta ¿Por qué siempre las mejores preguntas son aquellas que carecen de respuesta? Bueno, me voy a mojar (humedad mala). Por si me preguntan (que lo han hecho), diría que “Dark City” es un thriller psicotrónico de ciencia ficción con achaques (varios y todos ellos convulsos) de cine negro. Esta es la mejor definición que puede dar alguien tan cortito como un servidor que está y estará, eternamente agradecido a New Line Cinema por la genial idea gestada por estos de imponerle en su momento, al señor Alex Proyas, “algunas” de las clarividentes revelaciones realizadas por el personaje del Dr. Schreber (Kiefer Sutherland), tras visionar la película terminada, pues, según ellos, esta, era de tal complejidad, que difícilmente podría ser comprendida por el espectador medio de a pie (como se hubiese agradecido en su momento, que a la productora de “Matrix” se le hubiese pasado por la cabeza algo parecido).

Y ya que hablamos de “Matrix”, tenemos que hablar de influencias. Mucho se ha hablado (hablamos, hablar, hablado) de si la obra maestra de los hermanos Wachowski es en realidad, un plagio de la película de Proyas, tantas biliosas conjeturas paranoicas se han dejado refluir de las entrañas de aquellos que no terminaros de empatizar con las desventuras apocalípticas del elegido y su troupe, que uno, al final, incluso termina dudando. En cualquier caso es bastante descabellado pensar que algo tan grande como fue “Matrix” (a todos los niveles), pudiera gestarse en tan escueto margen de tiempo, pues no olvidemos que el mismo transcurrido entre el estreno de “Dark City” y el de la primera entrega de “Matrix”, fue de apenas un año. Dicho esto, también decir que el ser humano es una criatura harto influenciable (unos más que otros) y las influencias o inspiraciones han estado, están y estarán (pasado, presente y futuro), a la orden del día. Sin ir más lejos, “Dark City”, en toda su mística y en toda su grandeza, no deja de beber de conceptos ya expuestos con anterioridad. Sin ir más lejos, el ídem de los recuerdos artificiales que yo recuerde (sin artificios), ya se había tocado con suma pasión en una tal “Blade Runner” primero, y en una tal “Gattaca” después. Al igual que la idea de observar sobre el terreno y en secreto a una sociedad, por parte de otra técnicamente más avanzada, bien para su estudio, bien para explotar sus recursos. De esto, también tenemos ejemplos. Sin duda, a los “trekis”, les vendrá alguno que otro a la cabeza, como aquel “Who Watches the Watchers?” (“¿Quién vigila a los vigilantes?”) de la serie “Star Trek: La nueva generación” o, sin abandonar la mítica franquicia, aquella otra película (grandiosa, por cierto): “Star Trek: Insurrection”.

Quiero decir con esto, que desde que el mundo es mundo, las influencias van y vienen en todas direcciones y que tachar a “Matrix” de copia de “Dark City” es tan ridículo como tachar a esta de lo propio de “Blade Runner”. Con esto (y me repito) tan solo quería dejar claro mi posicionamiento a este respecto y no, lo juro, darle más sazón a este refrito.

Pues eso, que en realidad no hacía falta hombre, que no es tan fiero el lobo como se pinta, no tan compleja la historia. Tampoco lo creyó así Proyas (que imposiciones a parte), el cineasta quiso decir la suya años después con la inevitable “Director´s Cut” de su película, versión alternativa a la que se pudo ver en cines y en la que se suprimió el didáctico prólogo del Dr. Schreber donde explicaba el origen de los ocultos y algún que otro monólogo suyo para demostrar al respetable que si se quiere, se puede (entender, digo). Para compensar esto y para darle algo más de encanto a esta versión, fueron añadidos diez minutos extras repartidos a lo largo del metraje, porque cuan triste y poco seductor habría sido sino, gastarnos los cuartos en dicha edición.

Y es que el mensaje de “Dark City” es claro y directo, aunque engañoso también. Me explico. ¿Cuál es dicho mensaje? Fácil. Que aquello que nos hace únicos, aquello que nos define como individuos, no se encuentra en el interior de nuestra mente, sino de nuestra alma. De esto, hay dos secuencias fundamentales en el filme, dos mensajes nada subliminales de Proyas al espectador. La primera, cuando John y Emma hablan en comisaría. A la explicación del asunto por parte de su marido, del tema de los recuerdos “prestados”, ella le contesta algo así como que puede que hayan modificado sus recuerdos, pero no sus sentimientos, que lo que siente por él no se puede manipular. La segunda ya en el tramo final, cuando John le revela al señor Manos que las respuestas que ellos ansían (en referencia a los ocultos), no se encuentran en su cabeza, sino en su corazón.

Digo que este mensaje es engañoso, porque a nivel lírico está muy bien, muy poético si queréis. De acuerdo. Pero con los pies en la tierra y abrazando con esmero a esa buena señora que lleva por nombre cordura (llámese también realidad), esto es, irrefutablemente falso. No hay base científica alguna detrás de semejante argumentación. ¿El alma? ¿Qué diablos es el alma? Vale, según fuentes contrastadas que comienzan por W: El término alma o ánima (del latín anima) se refieres a un principio o entidad inmaterial o invisible que POSEERÍAN los seres vivos y cuyas propiedades y características varían según diferentes tradiciones y perspectivas filosóficas o religiosas. Ese condicional en mayúscula, encuaderna la idea, ilustra la portada con un bonito dibujo de llamativos colores y la guarda en la mesita de noche de la habitación de un niño a la espera de que su progenitor/a se lo lea antes de ir a dormir. Lo que nos define como individuos, lo que dicta lo que somos y lo que podemos llegar a ser, se encuentra únicamente en nuestra mente. Es por eso que en mi opinión, uno de los pocos defectos que he sabido encontrarle siempre a la película, es el poco rigor de su mensaje. Lo cual, no quiere decir que me disguste o que no sepa apreciar la belleza de los versos.

A partir de dicha premisa, Proyas construye un relato oscuro utilizando a otra figura folclórica como aparato motor, la de “el elegido” (si, como en “Matrix”), su nombre, John Murdoch (Rufus Sewell). Y aquí, al igual que en las crónicas de Sión, podemos interpretar el fenómeno en cuestión. Verlo desde sus dos posibles perspectivas, la mística (profética en este caso) o la científica. Yo abogo mucho más por la segunda. Porque para mi, la figura del elegido tan solo responde a la teoría de la evolución de las especies de aquel buen señor de apellido Darwin. John Murdoch, no es ningún elegido, no hay nada divino o místico detrás suyo. No es el “único”, simplemente es, el “primero”. Las especies que se adaptan al medio, son aquellas que sobreviven y de todas ellas, el hombre, el ser humano, es genéticamente el más preparado para ello. Esto es lo que hace Murdoch en la película, adaptarse, aprender la capacidad de sintonizar para sobrevivir (lo mismo vale para Neo).

Con esta capacidad, nuestro hombre hará frente a los oscuros, los “villanos” de la historia. Si, entre comillas, porque en realidad, los ocultos no son tal cosa (villanos, digo), tan solo intentan adaptarse para sobrevivir, es por eso que “Dark City” siempre me ha parecido un relato tan sumamente triste, no hay victoria posible en esta batalla, gane quien gane, el espectador (o al menos aquel, que tenga ALMA) pierde. Ni siquiera, atribuyéndoles a estos por un momento, por un instante, por un descuido, la etiqueta de villanos, así, sin comillas, sería capaz de entender como tal, el supuesto final feliz de la historia. SPOILER Recordemos. Los “malvados” ocultos son derrotados y Murdoch asume el control de la nave, moldeando la realidad a su antojo y conveniencia. ¿Que diferencia hay para el resto de sujetos? Estos seguirán condenados a vivir esclavos de unos recuerdos que no son suyos, de unas vidas que no les pertenecen, seguirán siendo ratas dentro de un laberinto, solo que esta vez, la luz del flexo estará apagada y que una antigua civilización ha desaparecido por completo. Y el bueno de John, convertido ahora en su guardián, en su adalid, en su rey, en su amo, en su dios. Si acaso, es un bonito final para él, que podrá disfrutar de “su” vida como se le antoje. El resto está sentenciado a la esclavitud de sus falsa existencia mientras exista la figura de John, y lo que es peor, a desaparecer con él cuando este lo haga. Lo dicho, triste. FIN SPOILER

Tenemos pues ya dibujados algunos de los elementos claves de “Dark City”: El lugar, la trama, el mensaje, el protagonista... Vayamos ahora con los secundarios, escuderos de lujo para nuestro caballero andante en su utópica travesía hacia la brisa del mar. Tres es el número. Comenzaremos por caballerosidad, por la chica de la historia, Emma Murdoch (Jennifer Connelly). Dicen que no hay luz sin oscuridad y viceversa. Pues si una cosa está clara, es que Connelly es la pequeña brizna de luz en una historia tan oscura como esta, reflejando el brillo de un cielo sin estrellas en su pálido rostro e iluminándolo todo a su paso. Belleza, sensualidad, ternura. Tres también. Tres rasgos intrínsecos de esta señorita que aquí, en contraste con la más absoluta oscuridad, brillan con más fuerza que nunca. Emma es el faro luminoso en medio del mar que guía al navío a buen puerto y le impide estrellarse contra las rocas, la brújula que siempre señala hacia el norte y que mueve los pasos de John, el presunto asesino. Condición que nunca le atribuirá su bella esposa pese a que todos los indicios apunten a ello.

1998. Ese es el año, esa es la mujer. Una Jennifer jovencita, aniñada, mucho más cercana en apariencia a aquella jovenzuela adolescente de “Dentro del Laberinto” que a la mujer estilizada de hoy. Belleza, sensualidad, ternura y un numerito musical, para el recuerdo.

Es curioso (y permitidme el inciso), como gran parte de las secuencias donde aparece Connelly, están editadas de forma brusca. Da la sensación de como si se hubiesen recortado algunas de estas en el montaje final (y si bien la “director´s cut dice lo contrario), yo siempre me quedaré con ese gusanillo. En especial la parte donde Emma se encuentra con el inspector, todo tan poco desarrollado... sexo animal a cuatro patas, nada de preliminares, ni velas, ni música romántica. Este es otro de los diminutos puntos negros de “Dark City”, no solo en esa parte, también en otras, es como si Proyas hubiese sacrificado partes de diálogo en pos de favorecer el ritmo de la trama, cosa que sin duda, habría conseguido, pero yo, hubiese agradecido algo más de densidad narrativa, algo más de espesante en la mezcla, algo más de relleno en el sostén, aunque solo hubiese sido eso, relleno.

Hecho el inciso, prosigamos por donde lo dejamos.

Otro actor de lujo para otro secundario de lujo: William Hurt como el inspector Frank Bumstead, personaje tipo del cine negro más clásico. Sabueso solitario encargado de la investigación de los supuestos crímenes de Murdoch, que al igual que la ciudad, al igual que la historia, evoluciona de forma considerable a lo largo del metraje, pasando del némesis circunstancial de los inicios a uno de los principales valedores de John y protagonista además, de algunas de las secuencias con más inri de la cinta, como por ejemplo la de los cordones desatados. Junto con la estética de los años 40 y su relación, característica del cine de aquella época, con el personaje de Emma, Bumstead es el encargado de aderezar todas las copas de la velada con ese chorrito de “noir” que contribuye de forma definitiva a la peculiar estética que recrea el filme.

Y para terminar con los lujos, la tercera figura, la de la polémica, la del Dr. Daniel Schreber (Kiefer Sutherland). El guía espiritual de la historia, el topo de New Line Cinema. Este recupera otra figura clásica del fantástico, la del mad doctor. Aliado de circunstancias de los ocultos, poniendo sus bastos conocimientos científicos al servicio de estos, Schreber conspira contra ellos en las sombras (¿donde si no?)para derrocarlos. Por supuesto, y visto lo visto, el personaje interpretado por Sutherland Jr., es un ídem (supuestamente) fundamental para la comprensión de la historia o al menos, para hacerla algo más digerible según algunos.

Por supuesto, dejamos lo mejor para el final, siempre hay que dejar lo mejor para el final. Y lo mejor de “Dark City”, a mi juicio, son los ocultos. Los ocultos esto, los ocultos lo otro... ¿pero quién diablos son los ocultos? Alienígenas. Una raza antigua, muy antigua. Sabia, pero decadente. Víctimas de su propia naturaleza, víctimas de su colectividad.

Las referencias estéticas de los ocultos son bastante evidentes, aquí no hay medias tintas posibles. Desde el Nosferatu de Schreck y descendientes al cenobita común. Aunque para hallar la mayor de todas, tanto en continente como en contenido, tenemos que volver a indagar en el universo “treki”, y viajar concretamente, hasta el cuadrante Delta. Es allí donde encontramos el auténtico origen de los ocultos, pues es allí donde encontramos a sus primos hermanos, los Borg.

De estos, no solo heredan su apariencia física, sino también todos los rasgos que los definen cono raza. El principal de ellos: la colectividad. Muchos al son de una consciencia única, una única voz, un único propósito, un único fin. En “Dark City”, nos cuentan que es precisamente esta colectividad, esta falta de individualidad, lo que les ha llevado al borde de la extinción, motivando así su interés en el ser humano, en el secreto de aquello que lo hace único respecto a sus “iguales”.

En su afán por dicha individualidad, los ocultos, criaturas originariamente de naturaleza arácnida, muy en la línea de las ya vistas en aquella estupenda “The Hidden” (“El Oculto”) que dirigiera Jack Sholder por los derroteros de 1987, intentan asimilar (y esto también es muy Borg) la apariencia humana, utilizando cadáveres humanos como huéspedes u hospedadores, haciendo uso del lenguaje hablado e incluso, otorgándose nombres propios a partir de elementos del vocabulario terrestre ( Sr. Mano, Sr. Libro, Sr. Muro, etc...). Destacar a dos de ellos: Sr. Libro y Sr. Mano (Richard O´Brien). El primero, neo líder y voz sonante del colectivo. El segundo, auténtica némesis de John Murdoch, oculto que es inyectado con sus recuerdos con el fin de poder darle caza y figura que pone rostro y amplifica de paso, el mensaje de la cinta, el mensaje de que lo que nos hace ser como somos, no se encuentra en el interior de nuestra mente (ver condicional en mayúsculas).

Y esto, es mas o menos y a grandes rasgos, lo que da de si la pequeña mente de alguien tan cortito como el que suscribe para hablar de una obra tan grande como esta, magnífico ejercicio de existencialismo vestido de ciencia ficción y con perfume de cine negro que solo podía firmar un talento como el de Alex Proyas. Una película de culto y visionado obligado para cualquier amante del cine fantástico. ¿SINTONIZAS?

Bonitos recuerdos (aunque no sean míos): La historia, la estética, la banda sonora, el ritmo y su omnipresente oscuridad a todos los niveles.

Recuerdos traumáticos de infancia: Su mensaje, carente de validez (a nivel científico) más allá de sus propios límites, su escaso metraje, cierta brusquedad en el montaje y la poca fe de New Line Cinema en la inteligencia del espectador.

"Dark City", por fin en Blu-Ray

Llevo tiempo mordiendome la lengua para no anunciarlo, aunque posiblemente muchos ya se hayan hecho eco de la noticia. Más que nada por no quedarme sin mi ejemplar de una de las mejores películas de la filmografía de Alex Proyas. Ni más ni menos que la obra que le encumbró al olimpo del fantástico, “DarkCity” (1998).

Lo bueno se tiene que compartir. El próximo 8 de mayo de 2012 sale en nuestro país la edición en Blu Ray de la mano de Warner que seguro que nos deleitará con jugosos extras. Ya estaban tardando.

Sinopsis: John Murdoch se despierta solo en un extraño hotel. Ha perdido la memoria y es perseguido acusado de ser el autor de una serie de sádicos asesinatos. Mientras intenta recordar su pasado, descubre un submundo habitado por “los ocultos”, unos seres con la habilidad de adormecer a las personas y alterar a la ciudad.


CONTENIDO EXTRA BLU-RAY

Comentarios del director Alex Proyas, los guionistas Lem Dobbs y David S. Goyer, el director de fotografía Dariusz Wolski, el diseñador de producción Patrick Tatopoulos y el crítico de cine Roger Ebert / Recuerdos de Shell Beach / La Arquitectura de los Sueños / Tráiler Cinematográfico.
FICHA TÉCNICA
Formato: 16x9 2.35
Duración: 100' Aprox.
Audio: DTS-HD Master Audio 7.1: Inglés. Dolby Digital 5.1: Castellano y Alemán. Dolby Digital 2.0: Portugués.
Subtítulos: Castellano, Portugués, Sueco, Noruego, Danés y Finlandés.
Codificado para sordos: Inglés y Alemán.

"Crawl", no es país para inocentes camareras

Otra película que se ha presentado en el Festival de Cannes es “Crawl”, un violento thriller australiano escrito y dirigido por el debutante Paul China y producida por Benjamin China, su hermano gemelo. “Crawl” contará una historia universal, una cargada de suspense que podría ocurrir en cualquier lugar, fecha y momento.

Según su director, la película se centra en la tensión, la atmósfera y los personajes, construyendo un clímax inolvidable que llega a helar la sangre, y todo esto bajo la influencia de Alfred Hitchcock (“Psicosis”), de Martin Scorsese (“Shutter Island”) y de los hermanos Coen (“No es País para Viejos”). La cinta parece una propuesta inteligente y entretenida, y parece que sus responsables han puesto toda la carne en el asador para que la historia permanezca en la mente del espectador mucho después de que los créditos finales hayan llegado a su fin. De momento, ”Crawl” ya se ha llevado el premio al mejor director, a la mejor edición, y a la mejor actriz en el pasado Screamfest.

El reparto incluye a la actriz autraliana Georgina Haig (“Road Kill”), junto con Andy Barclay, Paul Bryant, Lauren Dillon, William Garvey, Paul Holmes, y Catherine Miller, entre otros. La película se proyectará hoy, viernes 18 de Mayo, en el Fantaspoa Film Festival y en el mercado de Cannes, ya veremos si finalmente los hermano China, se convierten en los nuevos hermano Coen, a juzgar por el estupendo tráiler, estos gemelos vienen golpeando fuerte, muy fuerte.

El despreciable propietario de un bar de mala muerte de un solitario pueblo rural, contrata a un misterioso asesino a sueldo croata para que asesine a un viejo conocido que le debe dinero. El crimen se lleva a cabo, pero accidentalmente entrará en juego una inocente camarera. Ahora, prisionera en su propia casa, la joven deberá tomar medidas desesperadas para sobrevivir...