domingo, 28 de febrero de 2016

Crítica: The House On Pine Street

No cabe duda de que llegados a cierto punto de nuestras vidas, los cambios suelen ser necesarios, inevitables, pero también traumáticos. Yo soy muy pro-cambios, creo que cuando tocas fondo, se necesita un cambio radical y creo que esto purifica, desintoxica y te hace renacer. A la vez, los cambios que implican nuevos comienzos son muy complicados y mentalmente muy estresantes. Aun así, insisto, no hay nada como un buen cambio para que los malos pájaros que habitan en tu cabeza echen a volar y se vayan para siempre a un lugar muy muy lejano.

sábado, 27 de febrero de 2016

Crítica: Nightscape

Ya en los créditos se nos ofrece una clara pista de las intenciones “Grindhouse” de su director, que aspira a seguir los pasos de alguien como Tarantino... Pobrecito.

jueves, 25 de febrero de 2016

Crítica: Sensoria

¡Basta ya, por favor! ¡Basta ya! Os lo pido de rodillas o haciendo el pino si hace falta. O si queréis me pongo duro y me propongo ser la primera persona que denuncia a una productora por publicidad engañosa. Ahhh… ¿Qué es una producción independiente? Pues me da lo mismo, eso no os da derecho a tomarnos el pelo. Ahhh… ¿Qué sobre gustos no hay nada escrito? Ni sobre tonterías, y todos las reconocemos. ¡Dejémonos de hipocresías y llamemos a las cosas como son, por favor!

lunes, 22 de febrero de 2016

Crítica: Deadpool

Había curiosidad, mucha curiosidad, para ver lo nuevo que ha parido la Marvel y que tanto revuelo ha levantado entre los aficionados. “Deadpool”, el antihéroe más bocazas de la factoría creado por Rob Liefeld y Fabian Nicieza allá por 1991, concebido en un principio como villano y evolucionado posteriormente a la categoría de parodia, protagoniza al fin su propia película, después del descafeinado debut en la gran pantalla que significó su aparición junto a “Follezno”... quiero decir, “Lobezno”, en “X-Men Orígenes: Lobezno” (“X-Men Origins: Wolverine”, Gavin Hood, 2009).

viernes, 19 de febrero de 2016

Crítica: Dead Kids (Strange Behavior)

El mayor reclamo de ‘Dead kids’ (‘Strange behavior’) es ver el nombre de Bill Condon como uno de los guionistas de esta película junto con el de el director de la misma Michael Laughlin. Condon posee una desigual trayectoria cinematográfica en la que el director norteamericano es capaz de dejarnos lo mejor con cintas como ‘Dioses y Monstruos’ (‘Gods and Monsters’) donde este arriesgó dando uno de los papeles protagonistas a Brendan Fraser un actor al que siempre se ha considerado como excesivamente histriónico y poco serio y del que fue capaz de sacar lo mejor de el, ‘Kinsey’ o la reciente ‘Mr. Holmes’ con otra vez como ocurrió con ‘Dioses y Monstruos’ con Ian Mckellen en su papel principal, pero que también nos ha dejado lamentables películas como las dos que cierran la saga de ‘Crepusculo’ y que destrozaron (no solo estas dos cintas si no todas las protagonizadas por Kirsten Stewart y Robert Pattison) la imagen que muchos teníamos de los vampiros forjada a lo largo del tiempo gracias a innumerables películas y libros que trataban el tema de una forma adulta.

miércoles, 17 de febrero de 2016

Crítica: Curse of the Witching Tree

Lo he dicho docenas de veces así es que para comenzar, y aunque dicen que disculparse nada más empezar no es un acto sincero, lamento si os resulta cargante. Pero la verdad es que actualmente nos movemos por impulsos, por modas. Todavía no hemos acabado la de los zombies, aunque se ha de agradecer que el número de producciones haya menguado, y por lo tanto, el tormento haya decrecido. Un tanto por el estilo se puede decir de los “found footages” de hospitales abandonados, casas encantadas, guarderías apederastadas, etc. aunque con las ventajas a nivel técnico y sobre todo económico que ofrece el método seguro que seguiremos sufriéndolo.

lunes, 15 de febrero de 2016

Crítica: Cabin Fever (2016)

A estas alturas de la vida, uno cree estar ya curado de espantos. Y si hablamos de “espantos” en la industria del cine, hablamos de remakes. Mucho se ha dicho sobre ellos y por lo habitual, cosas no precisamente buenas. Yo, en lo personal, he aprendido con los años, al menos, a tolerarlos y, como mínimo, a otorgarles el beneficio de la duda por más descabellada que pudiera pintar la broma macabra. Con esa mentalidad abierta, he podido disfrutar (en mayor o menor medida) de cosas a priori nauseabundas por el mero hecho de existir.

sábado, 13 de febrero de 2016

Crítica: El Bosque de los Suicidios

Siempre he tenido mucho respeto a la vida porque le tengo mas respeto aún a la muerte. No me gusta pensar que la muerte nos rodea constantemente. No me gusta pensar en la fragilidad del ser humano y, aunque soy consciente de que la vida es un segundo y me gusta aprovecharla al máximo, intentando ser lo más feliz posible, me da pánico pensar en que la vida puede ser sólo ese segundo, o que haya un sólo segundo que marque la diferencia. Todo esto me pasa porque me gusta vivir, con lo bueno y con lo malo, me gusta vivir.

jueves, 11 de febrero de 2016

"Abierto Hasta el Amanecer", estrujando la teta enroscada

Que morbosos que llegamos a ser. ¿Quien no ha sucumbido a la desagradable tentación, pero tentación al fin y al cabo, de dejar caer su curiosa mirada sobre el cadáver, puede que aun agonizante, de esa paloma atropellada en medio de la carretera?¿O a la de mirar de manera furtiva entre los dedos de nuestra propia auto censura tapándonos los ojos con la boca pequeña, en esa escatológica intervención quirúrgica que están emitiendo por la tele? Incluso, y esto sí ya, para las mentes más enfermas, quedarse (a riesgo de muerte cerebral) durante más de minuto y medio en “El cascabel” de 13 TV mientras hacemos zapping inocentemente una noche cualquiera... morbo señores, MORBO. Pues solo por el maldito morbo, puede justificarse la insana atracción hacia un producto a priori tan poco aconsejable como es la adaptación televisiva de la mítica cinta de culto del terror moderno y la serie B “Abierto Hasta El Amanecer”.

miércoles, 10 de febrero de 2016

Crítica: We Are Monsters

La primera edición del Festival Nocturna de Madrid que se celebró en el año 2013 se cerró con gran polémica y el motivo no fue otro que el nombre de la película considerada como gran vencedora del festival. La sueca ‘Wither’ de Sonny Laguna y Tommy Wiklund se alzó con los premios de mejor película, director y efectos especiales.

domingo, 7 de febrero de 2016

Crítica: Circle

Anoche, intentando encontrar la regla que resolviera la cuadratura del círculo, encendí la televisión y me encontré con la gala de los Premios Goya 2016, que cada vez resulta más soporífera, enlatada y predecible en los discursos (que casualmente se cortan cuando algo huele a reivindicación). La Gala de los Goya, con sus dramas sociales, con su necesidad de emular a los Oscar y con el halo de caspa que, sintiéndolo mucho, desprende, no me iba a resolver el problema: a mitad de gala, el cuadro seguía siendo cuadrado y el círculo seguía siendo redondo, por lo que activé el famoso canal online con cientos de títulos que te permite probar un mes gratis y que luego te engancha como la heroína, y te pica hasta los dientes, y ahí parecía estar la solución a mi dilema: "Circle" (Aaron Hann, Mario Miscione).

jueves, 4 de febrero de 2016

Crítica: Enter The Void

El cine de Gaspar Noé para bien y para mal no deja indiferente a nadie, y el cine de Gaspar Noé para bien y para mal siempre será recordado muy especialmente por una película: “Irreversible” (Y parece que va a seguir siendo así, a la espera de poder ver “Love 3D” las primeras impresiones en Cannes no han podido ser peores y es que a pesar de el uso del 3D parece que la película de Noé no tiene mucha historia. Llama la atención la poca imaginación de los periodistas al referirse a la película con comentarios del tipo “Gatillazo de Noé en Cannes”).

martes, 2 de febrero de 2016

Crítica: Freaks of Nature

Dicen por ahí, que no hay que mezclar churras con merinas. Por suerte, no todo lo que se suele decir por ahí, va a misa, como también se suele decir... por ahí. El caso, es que el arte de la mezcolanza pone a prueba la imaginación del ser humano a la hora de explorar las infinitas posibilidades de cualquier manifestación artística y en el séptimo arte y en especial, en nuestro amado género, lo de hacer mezclas a priori imposibles, o al menos, poco recomendables, siempre ha dado mucho juego. Y visto lo visto y por más que le pese al refranero popular, parece ser que lo va a seguir dando.