Crítica: El Hijo

Hace un tiempo cuando escribí acerca de ‘The Hive’ definí a esta película como el memento de los infectados (Algo que obviamente no fui el único en hacer), como una vuelta de tuerca de ideas ya vistas en otras películas que mezcladas con gracia y algún fallo hacían de esta película una irregular cinta que se veía bien y entretenía. Si en esta película, el director David Yaroveski cogió un elemento que normalmente está asociado con la diversión y la felicidad como es un campamento de verano para mostrar una vertiente terrorífica, ahora y cogiendo un guión escrito por Mark y Brian Gunn, este vuelve a hacer lo propio salvo que en este caso con el mito, con la historia de Superman.

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“Yaroveski y los Gunn construyen una historia de superhéroes malvados, oscuros, con toques propios del cine de terror y ciertos detalles tirando a gores”

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La versión sádica del superhéroe con el que muchos crecimos, un acercamiento a ciertas ideas ya expuestas en ‘La profecía’ de Richard Donner en la era de la Marvel y de DC, algo que ya ocurrió también en la reciente ‘The Prodigy’ de Nicholas McCarthy aunque en este caso dejando de lado la vertiente del cine de superhéroes y unas gotitas de gore, no muchas pero si apreciables que para eso estamos ante una cinta comercial, es lo que el espectador se va a encontrar en ‘El hijo’.

Una bendición. Un milagro que se cruza en el camino de Robert y Katherine Thorn, de Kyle y Tori Breyer. El sufrimiento por la perdida de un hijo o por la imposibilidad de concebir uno se verá de alguna manera anestesiado gracias al hijo de una mujer que falleció durante el parto o por un niño que se estrelló en una extraña nave en los alrededores de la casa de la pareja protagonista. Niños aparentemente perfectos, con una salud de hierro, que nunca han caído enfermos pero con un lado oscuro que poco a poco se irá mostrando en todo su esplendor. ‘El hijo’ no muestra el proceso de aceptación de su condición por parte del anticristo y la manera en la que las personas que tiene alrededor se van dando cuenta de ello, sino de un ser cuya naturaleza y por motivos diferentes a los de Thorn, es superior al resto de los mortales.

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“Yaroveski se muestra mas comedido que en The Hive, tomándose su tiempo para contar la historia que tiene entre manos”

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Yaroveski y los Gunn construyen una historia de superhéroes malvados, oscuros, con toques propios del cine de terror y ciertos detalles tirando a gores que harán las delicias de los espectadores, aunque por desgracia estos no llegan a lo que pudimos disfrutar en ‘The hive’. Eso si, por mucho que esta película se publicite por ser James ‘Slither: La plaga’ Gunn su productor y que esta esté escrita por dos de sus familiares no vamos a encontrar en esta historia ese humor irreverente o políticamente incorrecto que muchos recordamos de sus películas.

‘El hijo’, ‘La profecía’, ‘The prodigy’. Tres películas que se benefician del trabajo de sus actores más jóvenes. De Jackson A. Dunn, de Harvey Stephens, de Jackson Robert Scott. Tres actores capaces de pasar de mostrar la más pura inocencia a perturbar completamente al espectador. Sería difícil poder disfrutar de estas tres películas sin la solvencia de estos. Pero si ‘El hijo’ se apoya en Jackson A. Dunn, cuyo sadismo parece hermanarle directamente con el Paul (Arno Frisch) del ‘Funny Games’ de Haneke, también hace lo propio con una soberbia Elizabeth Banks y con un David Denman que da el contrapunto perfecto a esta. Yaroveski se muestra mas comedido que en ‘The Hive’, tomándose su tiempo para contar la historia que tiene entre manos, para que el espectador conozca a Brandon, para que entienda las motivaciones que llevan a sus padres a actuar de la manera en la que lo hacen y donde su mas que ajustado metraje resulta todo un acierto.

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“Yaroveski ha tirado la piedra pero ha escondido la mano, la sensación de que esta película podría haber sido mucho mas sádica, enfermiza y salvaje”

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Si en ‘Hereditary’, el director y guionista juega a ser Sófocles con sus personajes, haciendo suyas las palabras que el profesor de Peter dice acerca de la obra del poeta griego y llevando a sus personajes a formar parte de una compleja maquinaria donde no abunda la esperanza, el espectador podrá encontrar cierto paralelismo con las palabras que este escuchará en la clase a la que asiste el pequeño Brandon.

‘El hijo’ es una muy interesante película que mezcla elementos propios de las películas de terror (Reforzando gracias a temas como ‘Called to the Barn’ o ‘Don’t tell the sheriff’ de la banda sonora compuesta por Tim Willams), del drama (Con cortes como los titulados ‘Breyer Family’, ‘Who am i’ o ‘You ok’) y del cine de superhéroes (‘I’m very special’, ‘Revelations’). Es cierto que no todos sus pasajes funcionan como deberían, que hay momentos en los que parece que esta se atasca un poco, que parece que la propuesta va a perder su frescura, pero el buen hacer de Yaroveski detrás de las cámaras y del trío Dunn-Banks-Denman delante de ellas, consiguen llevar esta película a buen puerto. Es una lastima la sensación de que Yaroveski ha tirado la piedra pero ha escondido la mano, la sensación de que esta película podría haber sido mucho mas sádica, enfermiza y salvaje de lo que se ha plasmado en pantalla, pero con todo estamos ante una película muy entretenida, muy disfrutable.