Generalmente, el cine de terror abre con un prólogo en el que suele acontecer alguna escena impactante. Este movimiento estratégico, sirve de gancho para mantener al espectador atento durante el primer tercio del film, funciona bien la mayoría de las veces y suele ser suficiente para el primer tramo del film en el que el director y el guionista se entretienen y dedican a presentar a sus personajes etc, sin que pase demasiada cosa, refiriéndonos al terror.
Desgraciadamente el director Patrick Rea, que no tiene nada de parentesco con el actor Stephen Rea, no ha sabido hacer algo tan simple, empezar la partida con un buen movimiento de peón. El prólogo de Arbor Demon (segundo film de Rea) y de título original Enclosure, es de lo más insulso y poco carismático que he visto desde hace tiempo. Pero un servidor, que suele ser paciente, se mantiene a la espera de que su prometedora portada nos ofrezca un festín gore de talla grande.
Lamentablemente no es así, la tienda de campaña que llevan los dos protagonistas es de talla pequeña. La historia ya no espero que sea coherente, porque no lo es en ningún momento, pero podría haber sido más consecuente.
Dana y Charles se van de excursión en su aniversario, pocos días antes de que él comience una gira de seis meses con su banda. Pero ella le oculta un secreto, y además extraño algo ocurre en el bosque.
Aprovechando la leyenda del bigfoot, Michelle Davidson ha escrito el guión junto a Rea. Y lo que debería ser una película de terror convencional y sin remilgos se convierte en una película promaterna y ecologista, que no sabe ni siquiera transmitir las emociones más primarias al espectador.
Con un comienzo muy similar a Willow Creek, película dirigida por Bobcat Goldthwait (God Bless America), en su periplo inicial, Rea nos presenta la típica relación de pareja estereotipada y plagada de los clichés ya conocidos. No supondría mayor problema, siempre y cuando, entrados en materia su argumento no virase de forma repentina en torno a una leyenda absurda de unos ‘ents’ que viven en la arboleda. Una leyenda que no aporta datos coherentes o útiles a la trama.
Entre el reparto contamos con Fiona Dourif, la hija de Brad Dourif (El muñeco diabólico, El Señor de los anillos) y Jake Busey (Agárrame esos fantasmas), hijo de Gary Busey (Depredador 2). Pero cada ser humano tiene distintas cualidades y que estos sean hijos de actores con cierto talento, algo más por parte de Brad que de Gary, no asegura que sus hijos sean igual de buenos. Así como Brad demostró su gran talento en un personaje tan secundario como es Lengua de serpiente en la trilogía de El señor de los anillos, Fiona no convence en su actuación, es un leve reflejo de su padre. En cuanto a Jake, su papel es el eterno secundario al que se ha visto relegado en la mayor parte de su carrera, algo que parece haber heredado de su padre.
El actor que completa el trío principal y único de actores que sobrellevan la película, es Kevin Ryan, al que desconozco. Mirando un poco, veo que ha trabajado en series televisivas como Cooper o Crossbones. En la película de Rea hace un papel de novio estándar, pero su interpretación va empeorando conforme los minutos de film avanzan. Es cierto que el cine de terror no destaca por grandes interpretaciones, al menos, en este tipo de producciones menores, muchas de las cuales son direct to DVD. Pero los tres personajes principales, Charles, Dana y Sean, encarnados por Ryan, Dourif y Busey nos ofrecen pésimas actuaciones.
El apartado sonoro, supuestamente debería asustar al espectador con ruidos fuera de la Quechua, pero ni lo más mínimo consigue espantar. El diseño de producción, entre lo digital y algo (más bien poco) de artesano, denota una falta de gran talento e ingenio en dicho apartado. La verdad, es que la comuna hippie con exoesqueleto de ramas, hace daño a la vista y tiene menos carisma que un trapo de cocina usado. Mis ojos no daban crédito. Arbor Demon parece un chiste sin gracia con algunos referentes al cine de zombies.
Lo mejor: Los planos de árboles, estos actúan mejor.
Lo peor: ¿Dónde está el terror?
4 comentarios:
Ufff.. si ya me daba pereza esta película, leer tu crítica me sirve para reforzar lo que pensaba de ella y pasar olimpicamente de verla. Nada mas leer el punto de partida de la película, tu referencia a la infumable 'Willow Creek'. Me viene también a la cabeza 'The hunted' dirigida por Josh Stewart el prota de 'The collector' o 'The Neighbour' y que por lo que leo puede competir con esta 'Arbor Demon' en lo de insulso y poco carismático.. ¿cuando se darán cuenta de que cierto tipos de historias ya nos cansan y que solo consiguen que el espectador se cierre en banda a ellas?
Un Saludo!
Donnie
No he visto The Hunted, pero mi comparación con Willow Creek es por el desarrollo que tiene dentro de la tienda de acampada y la leyenda del Bigfoot, que aquí sirve como referente. Sin embargo, la obra dirigida por Bobcat es mejor que la presente Arbor Demon, al menos, para mí.
Saludos
Esto me recuerda al teorema del Sandwich: si dos funciones tienden al mismo límite cualquier otra función que se pueda acotar entre estas dos, tendrá también el mismo límite. Aplicado a lo que dices acerca de Willow Creek y que Arbor demon es desde tu punto de vista inferior a esta y considerando que para mi Willow Creek es de lo peor que he visto en mucho tiempo (Le doy un cero bien redondo), lo de arbor demon apunta también a otro cero bien hermoso...
A no ser que quieras pasar hora y pico realmente horrenda, te recomiendo que no veas 'the hunted' o que si lo haces saltes directamente a su parte final. El resto es mas que prescindible..
Un Abrazo!
Donnie
Pues vaya nombre para un teorema, no lo conocía. XD
Bueno, nunca se sabe. A lo mejor, Arbor Demon te parece un peliculón. Quizás, solo quizás, yo debería arriesgarme con The Hunted.
Saludos.
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