Crítica: Wolfcop

Crecí en los años ochenta, crecí cuando la carrera de Michael J. Fox estaba en uno de sus mejores momentos (Que duró mas o menos de mediados de los ochenta a principios de los noventa) y cuando en 1985 rodó dos de sus cintas mas conocidas, una de ellas la mítica “Regreso al Futuro” la otra “Teen Wolf. De pelo en pecho” (Aunque en España la primera se estrenó a finales del 85 y la segunda ya entrados en 1986).

Recuerdo haber ido al cine a ver ambas películas y habérmelo pasado en grande, tanto que creo que soy una de las pocas personas que le tienen cariño a “De pelo en pecho 2” (Cinta despreciada por muchos incluido su protagonista Jason Bateman). Siendo niño vi a escondidas muchas películas de terror en v/h/s que me dieron un miedo terrible y que ahora con el tiempo veo con una mezcla de admiración por como se hacía un cine con mucho ingenio y simpatía por lo inocentes que como espectadores podíamos llegar a ser. Es por eso que cuando descubrí que había una cinta titulada “Wolfcop” con un cartel tan brutal pensé que iba a encontrarme con un sano homenaje a esas cintas con las que crecí, una de esas cintas que se hacían en los años ochenta y que tanto añoro, en definitiva algo parecido a lo que hizo recientemente Joe Begos con su muy apreciable pero tremendamente maltratada “Casi Humanos” pero con mucho, mucho humor (La cinta de Begos resulta un sano homenaje al cine que se hacía en aquella década y que posee por ejemplo ciertas escenas que parecen sacadas directamente de “X-tro” de Harry Bromley Davenport). 

Por desgracia la cinta de Lowell Dean no consiguió ofrecerme nada de lo que esperaba de ella tan solo me hizo sentir como una especie de versión de carne y hueso de Homer Simpson que al igual que este se quedaba maravillado en un videoclub al ver un trailer de un mono con sombrero yo hacia lo mismo al ver el trailer y el póster de una película donde el protagonista es un hombre lobo policía… (Personalmente me resulta sorprendente que “Casi Humanos” con todos los fallos que tiene, que los tiene, este peor valorada en páginas como imdb que “Wolfcop”. La cinta de Begos a pesar de resultar irregular es un gran homenaje a ese tipo de cine que ya no se hace y probablemente sea eso, la sensación de que esa película llega casi treinta años tarde lo que haya podido jugar en su contra) “Wolfcop” es un quiero y no puedo, un chiste alargado y sin gracia (Y eso que la cinta solo dura hora y cuarto) que nos deja una primera parte tremendamente decepcionante donde el director y guionista se muestra incapaz de enganchar al espectador mas entregado (Y aseguro que alguien mas entregado que yo a la causa es difícil de encontrar). 

Por desgracia la cinta de Lowell Dean esta más cerca de convertirse en una especie de aburrido episodio piloto para rodar una serie versión Z de “Grimm” que del sano homenaje al tipo de cine que tanto me gusta y añoro. “Wolfcop” no funciona ni como parodia de la serie protagonizada por David Giuntoli. Si en “Grimm” un policía tras enterarse que desciende de un mítico grupo de cazadores descubre toda una fauna de seres fantásticos que viven a nuestro alrededor, en la película de Dean nos encontramos ante un policía alcohólico que se convertirá en un hombre lobo como consecuencia de un extraño y mágico ritual. Obviamente las referencias resultan mucho mas claras conforme avanza la cinta pero es mejor no profundizar demasiado aquí, mejor ver la película y la serie y opinar sobre los posibles paralelismos. 

Internacionalmente la cinta de Dean esta siendo distribuida por la Raven Banner, compañía que mueve cintas de terror de bajo presupuesto con una salida comercial en lo que se refiere a la pantalla grande un tanto limitada (Aunque sigo pensando y nadie me podrá hacer pensar lo contrario que si se hubiera querido apostar por “Odd Thomas” de Stephen Sommers estrenándola en cines y realizando una decente campaña publicitaria esta película hubiera tenido su público porque guste mucho o poco si algo tiene la cinta de Sommers es que resulta una película tremendamente entretenida). Son muchas las cintas que mueve la Raven Banner, algunas de ellas realmente interesantes como “Mexico Barbaro”, “The Battery” o “Graceland” por citar solo tres casos junto con otras realmente flojas como “Asmodexia” (Una de las grandes decepciones del pasado Festival Internacional de Cine Fantástico de Sitges pero que con el apoyo de la distribuidora ha conseguido estrenarse en Estados Unidos), “Hooked up” (Cinta producida por Jaume Collet-Serra) o “Madison County” por citar otros tres ejemplos. Hablar aquí de la Raven Banner y del gran trabajo que realiza no es algo gratuito lo hago porque la distribuidora maneja dos películas que parecen tener ciertas ideas o escenas similares, esas cintas son “The Demon’s Rook” de James Sizemore y obviamente “Wolfcop”. 

Si bien la primera es una especie de cinta de terror con momentos festivos ya que todo el que aparece en pantalla acaba muriendo de una u otra manera la película resulta lastrada por un comienzo excesivamente lento y por la horrible sensación que transmite del director, guionista y productor durante los quince primeros minutos de película de querer hacer de una cinta gamberra una película de autor. Es de agradecer que Lowell Dean sepa que su cinta es un mero entretenimiento, una serie Z y punto, algo para hacernos pasar el rato por lo que no hay signos de la pretenciosidad que nos dejaba el inicio de “The Demon’s Rook” (Aunque hemos de ser honrados, “Wolfcop” no brilla por un arranque modelico si no mas bien por todo lo contrario ya que Dean nos deja unos primeros veinte minutos realmente flojos que dejan claro el tipo de película, el tipo de humor y la clase de interpretaciones que nos vamos a encontrar lo que hace que el espectador se plantee en mas de un momento si seguir viendo esta película). 

Ambas cintas tardan mucho, demasiado en ponerse gamberras y hacer del sinsentido su mayor virtud, momento en el que la sangre y el gore tirando a cutre pero que tanto nos gusta empieza a aparecer en pantalla, porque si algo tienen este tipo de cintas a su favor es el de sacarle provecho a unos muy limitados efectos especiales dejándonos escenas realmente entretenidas en las que lo mas fácil que ocurra es que se nos escape una sonrisa bien sea por lo cutre o por lo cafre del momento. (Sirva como ejemplo en “Wolfcop” la primera transformación en hombre lobo del protagonista. Y hay que reconocer que las transformaciones tienen mucho encanto). Es claro que tanto “The Demon’s Rook” como “Wolfcop” comparten no solo los mismos paisajes (En ambas cintas se nos muestran esa especie de grandes graneros típicos de Estados Unidos o Canadá) si no también y muy especialmente ese aroma de cine cutre que nos encanta aunque ni en un caso ni en el otro los directores han sido incapaces de hacer de esto su mejor virtud. 

Son muchas las ideas desperdiciadas por Lowell Dean en su película, una de ellas y la más importante es el poco juego que saca a la idea de tener como protagonista a un hombre lobo policía y alcohólico. “Wolfcop” parece montada en base a diferentes anécdotas excesivamente desiguales alrededor de esta llamativa idea (El propio autor reconoce en algunas entrevistas que manejaba la idea de rodar una historia policíaca y una de hombres lobo y que al final decidió juntarlas en una sola). No hay un trabajo elaborado en lo que a historia se refiere, ni mucho menos hay un desarrollo de los personajes aunque todo esto realmente no importa en este tipo de películas porque lo que queremos es reírnos y pasar un buen rato, pero eso Dean tampoco lo consigue. Pero hay otra idea que maneja el director y guionista al principio de su película que acaba diluyéndose, desapareciendo de una manera demasiado extraña, incluso confusa y esa no es otra que ese aroma a “Hobo with a shotgun” que desprende el principio de la película. 

Tanto la cinta de Jason Eisener como la de Dean comparten esa idea de situar la historia en un pueblo o ciudad donde el mal campa a sus anchas, cualquiera que haya visto la película de Eisener verán en el inicio de “Wolfcop” escenas que nos remiten directamente a “Hobo with a shotgun”. Pero dejando de lado si la película de Eisener es buena o no, su cinta nos ofrece todo lo que queremos ver en una película como la suya: Espectáculo gamberro, risas y exceso puro y duro, en definitiva una cinta tan salvaje como divertida. Eisener arriesgó con su película y ganó, Dean no ha sabido o no ha querido arriesgar y su cinta se ha quedado en nada, en una aburrida hora y cuarto de la que solo se pueden salvar ciertas escenas ya que ni lo que nos cuenta acaba por interesarnos ni nos resulta divertido. Por desgracia el hombre lobo de Dean no es el vagabundo de Eisener. 

Por mucho que Lowell Dean reconozca que sus fuentes en lo que a terror se refiere son Sam Raimi, Peter Jackson o Guillermo del Toro (No hay rasgos del ingenio de estos por ningún lado), por mucho que el director y guionista comente que le gusta la reacciones que el género de terror produce en la gente (Bien se la risa nerviosa tras la escena de miedo o el susto) y por mucho que nos acerquemos pensando que esta cinta es una serie Z, “Wolfcop” resulta una película muy decepcionante y aburrida. O simplemente es que mi sentido del humor no coincide con el de Dean… 

Lo mejor: Solo dura hora y cuarto. La primera transformación en hombre lobo del protagonista. 

Lo peor: Amenazan con una segunda parte. La escena de sexo.