Crítica: La Tribu

Cuando vi el póster promocional de "The Tribe" me llamó mucho la atención una frase que aparecía y que venía a definir la nueva película de Jorg Ihle como una mezcla entre "The Descent" y "Depredador", por lo que mi interés por su visionado ha ido "in crescendo" desde aquel día hasta el momento de su visionado, un caluroso domingo de agosto después de comer, igual es por eso que mío fue el trabajo para conseguir mantener los ojos abiertos durante los primeros 45 minutos de metraje, más cuando sólo comenzar a uno lo torturan con el eterno grupo de jóvenes fiesteros que se preparan para iniciar uno de esos viajes que tan bien suelen terminar, y por si esto no fuese ya suficiente desafío para nuestra paciencia, y en un claro ejercicio de mal gusto, lo aliñan todo con una horrible banda sonora a base de rap y música para adolescentes americanos que consiguió remover el cordero con "all i oli" que yacía en mis entrañas. Pasado el mal trago y con la digestión ya medio hecha, hay que decir que la cinta mejora de forma considerable a medida que avanza, y aunque en el fondo estamos ante el clásico "slasher" adolescente, la sustitución de los aldeanos caníbales de toda la vida por un grupo de "Uruk- hais" prestados directamente de "El Señor de los Anillos" pululando a su antojo por una recóndita isla desierta en busca de "amigos", le da al filme ese pequeño toque diferencial respecto a la infinidad de propuestas de esta naturaleza que infectan las estanterías de nuestros videoclubes, y/o en el peor de los casos, nuestras pantallas de cine.

Pero, ¿eran lícitas las comparaciones con películas de la talla de "Depredador" o "The Descent"? Obviamente y como suele ocurrir en estos casos, no. Aunque es cierto que Ihle a cogido prestadas ciertas "influencias" tanto de la obra maestra de John McTiernan como de la notable película de Neil Marshall. De la primera cogiendo la selva como escenario de la acción así como ciertas similitudes físicas entre sus criaturas y el alienígena cabrón que se enfrentó con el "gobernator", por no mencionar el claro guiño en la parte final emulando la mítica secuencia de Swarzenegger untándose de barro, y de "The Descent" pues las escenas que se desarrollan en el interior de las cuevas, con criaturas ciegas que se guían por el olfato incluidas.

A nivel técnico "The Tribe" es una película correcta, tanto a nivel de efectos especiales, con unas criaturas bastante bien realizadas (donde se agradece que se haya prescindido de los efectos digitales), como a nivel de filmación, donde yo destacaría el acertado uso de la cámara, que dota al filme de un ritmo bastante ágil en su segunda mitad, aunque en alguna ocasión nos obvie alguna muerte con el recurso fácil de la cara de susto previa defunción.

Pero lo mas destacable de la cinta es su protagonista, la actriz Jewel Staite a los que muchos recordarán de la serie de ciencia ficción "Stargate: Atlantis", que aquí borda una de esas actuaciones que pueden sacar a una película como "The Tribe" de la mediocridad a la que estaba condenada, dando forma a un personaje que lejos de sus planos compañeros de aventura, evoluciona y gana en interés al unísono con la película.

Conclusión, "The Tribe" no deja de ser la misma propuesta de cine "slasher adolescente" de cada día, y pese que en esta ocasión ha habido la voluntad de intentar hacer algo un poco diferente poniendo en escena a esta especie de criaturas tolkianas, en el fondo cae en los mismos tópicos de siempre y resulta tan previsible como cualquier otra del género, por no decir que tampoco estamos ante un trabajo demasiado explícito que digamos y aunque violencia "hayla", la sangre brilla por su ausencia. En lo positivo decir que la cinta va claramente de menos a más y gracias a la fuerza que emana la actuación de Jewel Staite (auténtico sustento del filme), adquiere algo de personalidad en su parte final. Un propuesta bastante digerible que ofrece lo justo para pasar un rato entretenido sin mas.