jueves, 12 de julio de 2012

Crítica: Scream

Siempre he considerado que la calidad de una película ha de medirse por la calidad de la misma y no por factores externos como el contexto o la época en la que apareció o fue realizada.

Aunque si bien es cierto que hay ciertas películas en las que si desconocemos el contexto del momento en el que llegaron a la cartelera, nunca podremos valorar la importancia que tuvieron en su época.

Sirva como ejemplo Psycho (Alfred Hitchcock, 1960), película que demostró que el género de terror y suspense podía ser tan importante y respetable como cualquier otro. Alejándolo de la imagen de cine poco serio o de segunda categoría sufrida hasta ese momento a pesar del dinero generado durante décadas y contar con una enorme legión de incondicionales fans.

Scream (Wes Craven, 1996) apareció en el momento idóneo para el decrépito género de terror que a mediados de los 90 languidecía lentamente sumergido en el mar de las secuelas de éxitos de finales de los 70 y mediados de los 80 (La matanza de Texas, La noche de Halloween, Viernes 13, Pesadilla en Elm Street, Muñeco diabólico, Hellraiser… etc).

Resulta curioso que el propio Craven, cansado de ver como su noctámbula criatura, Pesadilla en Elm Street, había perdido todo su color, secuela tras secuela, decidiese en 1994 llevar a cabo todo un ejercicio de metalenguaje fílmico con La nueva pesadilla.

Una película de ¿Terror? Donde la mayor novedad, que no acierto, era el hecho de que la historia trataba de una película que se desarrollaba dentro de otra película, en donde ficción y realidad se fundían peligrosamente.

Este hecho no era nada nuevo dentro del mundo del cine, pero si un buen nuevo punto de partida para intentar dignificar mínimamente una saga, cuyo personaje principal, había pasado de ser un personaje aterrador a un psicópata sustentado por sus chascarrillos y donde la tan potente como malsana historia original, había acabado sepultada en un collage de efectos especiales que intentaban esconder, sin éxito, la falta de calidad de los sucesivos guiones.

Pero seamos sinceros, Craven no es Kevin Williamson, y aunque en el pasado hubiese demostrado ser un guionista más que competente, es Williamson el verdadero maestro en lo que a cultura cinematográfica y popular se refiere, sin olvidar su gran conocimiento de las inquietudes más profundas dentro del género adolescente.

Lo que Craven solo había conseguido a medias con La nueva pesadilla, lo consiguió completamente con Scream.

Varios son los factores que hicieron de Scream el éxito que el género de suspense y terror necesitaba para salir de su dilatado letargo.

El primer factor y puede que el más importante, es sin lugar a dudas el estupendo libreto firmado por Kevin Williamson, lleno de referencias al género.

- Scream es una película que se ríe inteligentemente del propio género al que pertenece, convirtiendo al espectador en cómplice de todo lo que sucede en pantalla.

Las referencias fílmicas son rápidamente reconocibles por el gran público, facilitando así su implicación con lo que se nos está contando.

Preguntas trampa sobre el género del que posteriormente la propia película se reirá.

El ejemplo más claro es el discurso que Randy lanza sobre las tres reglas del género que se han de respetar dentro de una película de terror si se quiere sobrevivir… otra vez, cine dentro del cine…

- Un comienzo demoledor que sienta las bases de lo será el cine de terror adolescente de finales de los 90 y que nos avisa de lo que podemos esperar de los próximos 90 minutos…

- La película rompe con las reglas establecidas en lo referente al tipo de asesino en serie impuesta por el género en aquel momento (Jason Vorhees, Michael Myers).

La figura de Ghostface supuso una gran novedad y un soplo de aire fresco al tratarse de un nuevo tipo de asesino, inteligente, que acosa telefónicamente a sus víctimas y actúa de forma estudiada, como si de un depredador se tratase.

Un asesino en serie, que no es inmortal ni de origen sobrenatural, cuya identidad se nos ocultará hasta el final, generando todo tipo de teorías dentro de la cabeza del espectador durante todo el metraje. Consiguiendo en algunos momentos alejarnos del terror para acercarnos al género policiaco, cayendo casi sin darnos cuenta, en la trampa que propone el propio juego de la película.

- El enorme abanico de posibilidades que se abre cuando el novio de Sid, la protagonista, es encarcelado como sospechoso y cuya inocencia o culpabilidad no será descubierta hasta el final.

Este hecho, no hace más que aportar más dudas y alicientes en las apuestas sobre quién puede ser el asesino.

La desconfianza hacía el personaje de Billy aparece y desaparece según el antojo de Williamson, dándonos constantemente una de cal y otra de arena.

- El guión, también sabe construir y preparar de manera sumamente natural, algunas de las mejores sorpresas de la película, como por ejemplo, la referente al desfase de 30 segundos que tiene la cámara que utiliza el personaje de Courtney Cox para espiar a los estudiantes durante la fiesta.

- Contiene diálogos y situaciones que dicen en voz alta todo lo que los amantes del terror siempre habíamos visto que fallaba dentro del género, y siempre son resueltas de forma irónica, creíble y muy inteligente.

Como la secuencia en la que Neve Campbell, habla sobre porque las chicas con grandes pechos y poca inteligencia son siempre rápidamente asesinadas en el cine de terror adolescente, para poco después estar a punto de ser asesinada por repetir aquello de lo que segundos antes se burlaba.

Kevin Williamson entrega un guion lleno de trampas, que siempre va un paso por delante del espectador y que juega sin piedad con él.

Segundo factor importante, un elenco de actores jóvenes y algunos casi desconocidos hasta ese momento, que bordan sus personajes, juegan y disfrutan con ellos para conseguir engañar constantemente al espectador.

Ninguno desentona y todos están fantásticos.

Pero el otro factor esencial es la puesta en escena de Wes Craven, un maestro dentro del género.

Su puesta en escena, además de estar basada y cimentada constantemente sobre sustos tramposos, está repleta de guiños cinéfilos como el asesinato inicial, donde una actriz famosa como Drew Barrymore, teñida de rubio, muere brutalmente a manos del asesino nada más empezar la película para sorprender al espectador como hizo Hitchcock en Psycho.

Craven domina los tiempos y sabe como generar tensión en el espectador para jugar con él a su merced.

Scream no fue una película de terror más, fue la película que redefinió el género por completo, puede gustar más o menos, pero no se le pueden negar todos sus aciertos y no pocas virtudes.

En definitiva, lo que realmente diferenció a Scream del resto de sucedáneos e hijos bastardos que aparecerían poco después es, que a pesar de ser una película de terror para adolescentes, era muy divertida, muy tramposa y sobre todo, muy inteligente.

Lo mejor: Todo.

Lo peor: Inauguró un género que sería sobreexplotado durante los tres años siguientes con desigual fortuna (Sé lo que hicisteis el último verano, The Faculty, Leyenda Urbana…) provocando un rápido cansancio en el espectador de cara a este tipo de producciones.

Cuando llegó a las carteleras Scream 3, el público ya conocía a fondo la fórmula y poco podía sorprenderle, eso sin contar que Scream 3 es un auténtico despropósito como secuela y película, pero de eso ya hablaremos otro día…


13 comentarios:

The Wrong Girl dijo...

A mi Scream me gustó mucho cuando fui a verla al cine. Me impactó mucho la primera muerte... Y le tengo un gran cariño a la saga.

El Rector dijo...

A mi esta primera entrega si me gustó. No porque sea una gran película (y desde luego está muy lejos de los grandes títulos de Craven), pero si por su tono autoparódico y ese concepto que comenta el sr. Bates de "película dentro de una película" que ya trató Craven en la flojita séptima entrega de la saga de Pesadilla y que aquí, en tono humorístico, dio mucho mejor resultado.

Eso si, las secuelas, me sobran todas. Y toda esa legión de títulos para adolescentes surgidos a raíz del éxito del primer Scream, también.

Saludos.

Sergi Soler dijo...

Totalmente de acuerdo con El Rector...¿es raro no?

Norman Bates dijo...

Yo he de reconocer que soy muy muy fan de la segunda parte como dentro de poco descubriréis...

Darkotica dijo...

No lo voy a negar, en su día me lo pasé genial viéndola, la disfruté, y las posteriores bromas telefónicas que surgieron entre las colegas que la vimos no tuvieron precio.

Para mi Scream es pura diversión (bueno, lo fue en su día), pero se encuentra a años luz de las de Pesadilla en Elm Street, eso sin contar que la careta de Ghostface fue taaan explotada que al final me acabó repugnando. Y la 2 y la 3 me aburrieron bastante, me parecieron totalmente prescindibles, joder...para que Blanch y el Rector estén por primera vez de acuerdo en algo jaja!

P.D. Norman, Norman...no me metas a la maravillosa "The Faculty" en ese saco de desdichadas...

newzombie dijo...

craven es un director especial, a veces de muestra que es un genio y otras que es un inutil, pero prefiero tenerle como uno de los grandes directores del cine de terror, recordando todos sus clasicos que todos no sabemos de carrerila. yo soy fan de la ultima casa a la izquierda. que paso a recordar las cagadas

Unknown dijo...

Cuando se estreno en aquellos años (1996) todavía era muy pequeño (4), así que decidí no verla hasta un tiempo (porque me dio miedo) jaja!.. pero ustedes saben que la curiosidad mato al gato...

Finalmente la vi igual y me encanto, me fascino (me dio miedo, y quede paranoico unas semanas) al igual como cuenta Darko, después de ver la película con amigos y familiares uff las bromas no acabaron hasta que la popularidad de la cinta acabara, y recordar que para Halloween la mascara y la capa negra eran el disfraz mas usado en esas fiestas.

Para mi es un clásico, una tremenda película de terror, fue tanto el éxito que hasta el día de hoy hay secuelas y muchas otras películas que llevan la misma temática (algo que se ha vuelto muy pesado, y han estrujado asquerosamente) Tampoco se esperó menos del maestro Wes Craven uno de los mejores directores que tenemos en el genero y que nos ha regalado hermosas joyas, aunque como también muchos han comentado, esta no es su mejor obra pero destaca bastante.

Para mi es una muy buena película, un clásico que marcó a toda una generación por mucho tiempo y que hasta el día de hoy recordamos con mucho cariño.(reconozco que no he visto la 2 y 3)

Buena crítica Norman.. Saludos! ;)

Missterror dijo...

Aun siendo consciente de la dificultad que implica iniciar una nueva revolución dentro del terror, y que ese hecho por sí solo ya se merece mi respeto, debo decir que nunca he tragado Scream (ni por supuesto sus secuelas). Ni me gustó cuando se estrenó, ni me gustó cuando le volví a dar una oportunidad.
Me pone nerviosa la fórmula, Ghostface, los chavalines odiosos que salen en cada entrega, y los chistes fáciles...

Prefiero leer tu crítica e intentar contagiarme de tu entusiasmo, antes que ver cualquier escena de Scream...Ya me la he leído 2 veces, a ver si a la tercera le tomo mas simpatía a la película ;)

saludos

Spupydo dijo...

Excelente pelicula y la mejor de la tetralogia sin dudas y ademas tiene no solo la mejor escena inicial de todas sino de las mejores que he visto en una pelicula.Brutal y espectacular sin dudas.
La segunda tambien es muy buena y la tercera es mas floja pero sigue siendo aceptable para pasar el rato.En cuanto a la 4 pues me gusto mucho la verdad y la pongo como la mejor despues de la original y tiene la segunda mejor escena de apertura.La identidad del asesino tambien es de los mas sorpresivos.Al menos a mi me sorprendio realmente.
Saludos y buena reseña.

Ash Williams dijo...

A mi tambien me gusto bastante esta primera entrega y, como supongo a la mayoría, el interes fue decreciendo con las posteriores entregas.

La película tiene uno de los arranques mas espectaculares del genero sin duda. Que grande Craven.

Buena review. Un saludo a todos.

Ash Williams dijo...

Por ciero, ultimamente me habian llegado buenos comentarios de la 4, pero no la he visto. Veo que por aqui tambien se tiene en buena estima, tendre que pillarla por ahi... (antes de que nos suban el IVA!)


Un saludo de nuevo.

Norman Bates dijo...

A mi la cuarta entrega me parece horrible, es tan autoparódica que por momentos parece que estás viendo Scary Movie en vez de Scream...

Unknown dijo...

a mi me encantan las de scream, aunque la 3 me parecio un poco floja igual sigue siendo mi saga favorita de suspenso

Publicar un comentario

¿Tienes opinión? No seas tímido/a y compártela, pues en la diversidad está el gusto. Eso sí, intentemos no destriparle la película a nadie y avisa de SPOILERS al resto de lectores/as siempre que tu comentario los contenga. De no ser así, este será eliminado. Gracias.