El debutante Lee Hardcastle, quien participa en esta antología después de haber sido elegido por votación en el concurso organizado por Drafthouse, tiene la osadía de presentarse en sociedad con un producto muy superior a lo ofrecido por algunos directores ya contrastados que se han retorcido con más pena que gloria por las entrañas de esta criatura.
Y de entrañas trata precisamente la historia del amigo Hardcastle, quien con un buen puñado de plastelina, da forma (nunca mejor dicho) a una historia inspirada claramente en la serie B y en el cine de terror de los 80, con criaturas grotescas de corte Lovecraftiano, mucha sangre, mucho gore y sobretodo, mucho humor negro. Un viaje retrospectivo a nuestra propia infancia, un eco de aquellos miedos nocturnos que nos atormentaban cuando éramos críos y no tan críos, que ahora supuran de nuevo a la superficie gracias al impecable trabajo de animación que se esconde detrás de esta sencilla, pero preciosista propuesta, en la cual, además del fantástico diseño artístico (atención a la expresividad de las caras) y de las espectaculares secuencias gore que atesora, destaca sobremanera por su macabro sentido del humor. Vamos, una pequeña maravilla que hará las delicias de los aficionados más clásicos.
Moraleja adicional con aplicación práctica en la vida real: Cuando aprieta el ojete y oyes la llamada de la selva, no hay monstruos que valgan. La lucha por la supervivencia, comenzado ha.
Si tiene la consistencia apropiada, se puede hacer un “ghost”: Técnica y artísticamente, una gozada. Su sentido del humor, brutalidad y la lograda sensación de terror que transmite el pequeño de la familia.
De ahí para abajo, natillas (sin galleta) y poco más: Que algunos se gasten millonadas en hacer una película de animación y luego venga un señor de a pie y se casque una maravilla como esta con cuatro duros.
Hemos querido comenzar esta noticia recuperando un fragmento de la crítica que le dedicamos en su día a la interesantísima antología de cortos de terror, “The ABCs of Death”, en concreto del segmento dirigido por el debutante Lee Hardcastle, quien con “T is for Toilet”, relato de horror fantasmagórico perpetuado íntegramente con plastelina, sorprendió a propios y extraños (servidor incluido) en el que a la postre fue, uno de los más destacados cortos de la colección. Pues bien, el bueno de Lee, regresa a hora con “Ghost Burguer”, épica secuela de “T is for Toilet” que se desarrolla 12 años después de los hechos acontecidos en la primera parte.
Un diseño artístico despampanante, mucho humor negro, gore a mansalva y toda clase de entes sobrenaturales, se dan cita en un corto plagado de influencias al cine de terror moderno, tales como “Phantasm”, “Jóvenes Ocultos” o “Cazafantasmas”. El corto dura 22 minutos que no tienen ni uno de desperdicio y aunque aun no se puede ver con subtítulos, se sigue perfectamente en su inglés nativo. Que nadie se lo pierda.
4 comentarios:
Me encanta este concepto!
Ya se puede ver con subtítulos, y la verdad la vistosidad es evidente, la mañana con la plastilina a la hora de recrear emociones, impactos, expresiones como bien dices y conformar una historia a la perfección es bárbara. Me encanta el hecho de que la plastilina no esté perfectamente alisada y cincelada, y que se vean incluso las marcas de las huellas digitales.
Curiosisima historia, que peca de larga para un corto de esta categoría, pero que deja patente que Lee Hardcastle tiene una seña de identidad propia. Eso es lo importante.
saludos
me gustaría saber la canción que ponen al final en los créditos :'v
Reyna, por mi parte poco puedo ayudarte. Lo he estado mirando pero no he dado con el tema en cuestión por ninguna parte. Suerte en la búsqueda.
Saludos.
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