Crítica: In the Lost Lands

ROLOS NOS HABLA SOBRE EL ESPERADO NUEVO ATENTADO CINEMATOGRÁFICO DEL INFAME PAUL W. ANDERSON

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Como me duele hacer esta crítica, que tristeza genera escribir sobre las malas horas de un director que tantas alegrías me supo dar y que tiene en su haber una película que es parte ineludible de la historia del cine de terror; obviamente con esto me refiero a la descomunal “Event Horizont” (1997). La gran mayoría de los directores tienen en su currículum alguna cinta que fue vapuleada por la crítica o a la que el público le dio la espalda, es algo natural y le ha pasado a los mejores. El asunto radica en que luego de esto se logre levantar y rearmarse ante dicha caída. 

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“un guion basado en un cuento de G. R. R. Martín, a Mila Jovovich y Dave Bautista como protagonistas además de grandes dosis de acción en una cinta de tinte postapocaliptico con elementos de fantasía oscura” 

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Esto no parecer ser el caso de Paul W. Anderson. Lamentablemente su aura parece haberse apagado y su cine languidece en un declive que no muestra evidencias de repuntar, lo que es realmente una pena por lo que fueron sus inicios y lo que es su actual presente. Dicho de forma más directa, Paul Anderson parecer haber entrado en una decadencia - que ojalá logre romper-, pero que todo indica que por el momento no lo está pudiendo lograr, aunque quien sabe, mantengo la esperanza de que con su siguiente cinta resurja como un ave fénix. 

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“G. R. R. Martín no es un autor tan masivo como Stephen King como para mover a la gente a pagar una entrada en la gran pantalla, y sino recuerden el fracaso que fue Nigthflyers” 

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Pero vayamos por partes, primero veamos de que va su última película; en un futuro diatópico la reina de una ciudad decadente acude a una bruja (Mila Jovovich) para obtener la habilidad de volverse lobo, ella le dirá que puede darle ese poder pero que para hacerlo necesita ir a los desolados paramos a matar un cambiaformas, para eso contratará a un cazador vagabundo (Dave Bautista) que la guiará por unas tierras sin ley ni orden. 

No dudo que en la mente del británico “In The Lost Lands” tenía todo lo necesario para ser un gran éxito de taquilla, un guion basado en un cuento de G. R. R. Martín, a Mila Jovovich y Dave Bautista como protagonistas además de grandes dosis de acción en una cinta de tinte postapocalíptico con elementos de fantasía oscura. Lamentablemente lo que él pensaba que iba a permitir un éxito rampante tenía el propio germen del fracaso que resultó ser esta cinta. Primero tenemos una historia que deriva de un cuento de G. R.R. Martín, y si bien esto permitiría a uno pensar que llevaría a miles de personas al cine debido a lo popular del autor; la realidad es todo lo contrario. Es que seamos honestos, más allá de las pasiones que generó “Game of Trones”, ¿Cuánta gente leyó “Canción de Hielo y Fuego”? G. R. R. Martín no es un autor tan masivo como Stephen King como para mover a la gente a pagar una entrada en la gran pantalla, y sino recuerden el fracaso que fue “Nigthflyers” (2018) de Netflix. Se ofreció como un producto del creador de la serie del momento y no se la renovó por una segunda temporada. 

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“Otro elemento poco destacado son las escenas de acción, planos cerrados donde casi no se ve nada, poca emoción o tensión y problemas de continuidad” 

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Eso lleva al siguiente punto, la escritura del guion, cuando veía la película no podía evitar pensar en “Priest” (Scott Stewart; 2011), ya que la historia parece calcada de dicha cinta, en las dos tenemos un mundo postapocaliptico, criaturas de fantasía, un aire a western y por sobre todo mucho CGI; pero mientras en la primera hay un producto de calidad, en la segunda se nos ofrece algo confuso y enrevesado. “Priest” esta mucho mejor planteada que la que reseño aquí, ya que se nos muestra una magistral introducción animada que nos presenta al mundo que vamos a recorrer y esto no acontece en “In The Lost Lands”. Aquí nunca se nos explica como es dicho universo, como funciona, sus reglas, el pasado de sus protagonistas; inclusive hay incoherencias internas en la historia y ciertas cosas como el enamoramiento de sus protagonistas se vuelve inverosímil, ni que hablar de que el conflicto es un sin sentido, que una reina busque el poder de volverse lobo es totalmente delirante. Todo esto vuelve a la película aburrida, lo que es lapidario para una cinta de este género, creo que con otra historia más convencional la cuestión hubiera funcionado mejor, pero se decidió recurrir a Martín para atraer al público. 

Junto con el no menor problema de lo que, y como se cuenta, en la película viene otro elemento que contribuyó al fracaso de esta cinta; los protagonistas. Soy consciente que el currículum fílmico de Dave Bautista es descomunal, ha participado en cintas de renombre y ha sido dirigido por profesionales de la talla de Villeneuve, Shyamalan, Gunn, pero eso no basta para volverlo la principal figura y que genere un éxito en taquilla. Dave no es un actor principal, es un buen secundario y listo, no puede cargar un filme bajo sus hombros. Y esto lleva a la elección de Mila Jovovich como la otra protagonista, viene de varios fracasos de taquilla y este es otro que se suma a la lista. Es impresionante la falta de química que hay entre estos dos y la incompatibilidad que se muestra en pantalla, Bautista y Jovovich no lograron en ningún momento hacerme plausible lo que buscaban transmitirme, la idea de una pareja despareja que se va enamorando, me pareció increíble, más cuando todo ocurre en unos pocos minutos de metraje. Otro elemento poco destacado son las escenas de acción, planos cerrados donde casi no se ve nada, poca emoción o tensión y problemas de continuidad, soy consciente de que “John Wick” (Stahelski: 2015), puso la vara altísima en este apartado, pero eso no quita que debamos renunciar a que una película con escenas de acción, tenga buenas escenas de acción, cosa que aquí brillan por su ausencia. En resumidas “In The Lost Lands” es una mala película que no le hace ningún favor a Paul W. Anderson, siendo un ejemplo claro del mal momento que esta pasando en su carrera, espero que vengan nuevos vientos para este director, sería algo muy bueno.