Crítica: Kill Switch

Interesante aunque fallida cinta de ciencia ficción que le debe y mucho al trío formado por Roberto Orci, Alex Kurtzman (Si… el mismo que estrenó este verano la nefasta ‘The Mummy’, película hecha por y para el lucimiento de su estrella principal: Tom Cruise) y J.J. Abrams (Director que tras rodar el remake de ‘Star Wars: Episodio IV – Una nueva esperanza’ bajo el título ‘Star Wars: Episodio VII – El despertar de la fuerza’ es conocido por muchos como Jar Jar Abrams). Y decimos fallida porque a pesar de que la película de Tim Smit consigue que el espectador sienta curiosidad por aquello que está sucediendo, algo que sin duda se debe a la manera elegida por el director para mostrar lo que le ocurre al protagonista durante gran parte de la película especialmente en la primera parte de la misma y al guión de Charlie Kindinger y Omind Nooshin, las escenas de acción rodadas en primera persona dejan por momentos bastante que desear.

‘Kill Switch’ no es una cinta como ‘Hardcore Henry’ de Ilya Naishuller, ‘Pandemic’ de John Suits o ‘Dead Rush’ de Zachary Ramelan, películas rodadas en su totalidad (O casi) en primera persona lo que en ciertos momentos puede llegar a saturar y a confundir al espectador especialmente en lo que se refiere a la cinta de Naishuller. Smit solo utiliza este recurso en ciertos momentos y en gran parte son estos los que nos distancian de la historia. Sin ser una maravilla y desde luego nada, absolutamente nada original, ‘Kill Switch’ parece haber dado mas peso a la intriga que a la acción y al hecho de que Smit, Kindinger y Nooshin hayan intentado fusionar ideas vistas en cierta serie de culto que el próximo año cumplirá diez años de su estreno junto con un aparente acercamiento al cine en primera persona que tampoco está del todo justificado. Mientras ‘Hardcore Henry’ era una cinta tirando a festiva y ‘Pandemic’ una película que intentaba crear algún tipo de tensión en el espectador haciéndole protagonista de una historia de muertos vivientes, ‘Kill Switch’ tras la extrañeza inicial del espectador. podría haber sido rodado de una manera mas clásica y no pasaría absolutamente nada… bueno igual si, igual esas partes que son las mas flojas podrían llegar a aburrir todavía mas.

‘Kill Switch’ está protagonizada por ‘la bestia’ Dan Stevens que resulta más que solvente para su papel, una Berenice Marlohe cuya expresividad deja mucho que desear y Tygo Gernandt que es el tercer vértice del triángulo protagonista. La película de Smit adolece por la falta de un malvado de altura o de esos drones que bajo su temible apariencia no resisten más de dos disparos.

Pero ‘Kill Switch’ no se centra simplemente en la ciencia ficción, la acción y la intriga y los guionistas intentan dotar a la historia de cierta carga dramática para poder así justificar las motivaciones del personaje principal. Por desgracia esta parte de la historia tampoco acaba de funcionar y se queda muy lejos de lo mostrado y analizado por Mike Cahill en su opera prima. Es de agradecer que Kindinger y Nooshin hayan intentado crear un trasfondo para su historia pero sin llegar a saturar al espectador ni recurrir al sentimentalismo barato (Que aunque parece jugar con ciertas ideas que nos hacen pensar en eso, no acaba por caer en él y hacer de esta otra de esas cintas insufribles)

‘Kill Switch’ es una película de ciencia ficción que se ve bien, se disfruta en su justa medida y se olvida con demasiada rapidez. La cinta de Smit es una película sin demasiadas pretensiones y puede que ese sea su mayor acierto ya que acaba resultando hasta simpática. Y si, sigo pensado que detrás de Alterplex Energy está….

Lo mejor: Es una película que no engaña, que da lo que uno espera de ella. Y aunque la historia no es muy original hará que algunos de nosotros le cojamos cariño.

Lo peor: Las escenas en primera persona.