Crítica: Verotika

Tenía curiosidad por saber cómo sería la primera película de Glenn Danzig. Reconozco que en los años 90 ponía su canción "Mother" para hacer algo de ejercicio antes de ducharme. Eran otros tiempos, por aquel entonces escuchaba su CD "Thrall: Demonswitelive" en un Discman gris conectado a unos altavoces portátiles negros, todo un lujo. Empiezo a ver su película, "Verotika" (2019), y los títulos de crédito me transportan a una época pasada. Buena señal, me digo, la cosa va por el buen camino y me lleva de vuelta a los 90. Pero enseguida empieza el desconcierto. Primero aparece una actriz con pinta de prostituta, poco después aparece un hombre disfrazado de muñeco blanco que dice ser una araña albina, y luego a la chica le quitan la camiseta y se le ven las tetas. Pero no son unas tetas normales, son unas tetas que tienen ojos en lugar de pezones, y los muy jodidos me miran fijamente.

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“Una vez vista Verotika, ya no me froto las manos, lo que me froto son los ojos después de ver tanta bazofia junta”

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Si no fuese porque actualmente estamos viviendo en un mundo distópico (encerrados, sin poder salir, y con gente merodeando por ahí fuera con estrafalarias mascarillas puestas), probablemente me habría quedado algo más perplejo con semejante bizarrada. De todas formas, ya son las dos de la madrugada, y a estas horas todo se ve con un aura irreal. Así que me froto las manos, con la sensación de estar ante una nueva "The Room", ese tipo de películas que son tan malas que acaban siendo únicas. Pero nada más lejos de la realidad. No gano para decepciones. Una vez vista "Verotika", ya no me froto las manos, lo que me froto son los ojos después de ver tanta bazofia junta.

Danzig es todo un personaje, sigo creyendo que la curiosidad estaba justificada. Ex-cantante de bandas como “Misfits” y “Samhain”, al proyecto de “Danzig” le llega el éxito en los 90 cuando relanza la canción Mother con un nuevo videoclip (versión en directo de la canción ya publicada en el 88, cuyo vídeo había sido censurado). El nuevo videoclip titulado Mother 93, en el que Glenn nos enseña sus musculitos desde todos los ángulos posibles, es un éxito en la MTV y a Beavis and Butt-head les encanta y nos lo recomiendan. Es el momento de gloria de “Danzig”, quien en el mismo LP relanza otro temazo, Sistina (una de esas baladas capaces de despertar el lado más romanticón de cualquier metalero), y todavía tuvo tiempo para publicar un disco de "música clásica", titulado Black Aria, con buena acogida.

A partir de aquí, reconozco que le perdí la pista a este artista que, con la estatura de Pamela Anderson, consiguió hacernos creer que era Conan el Bárbaro y que además pregonaba ser un experto en artes marciales. El gran hostión (de forma literal) le llegó años después al circular por internet un video en el que el "frontman" del grupo “North Side Kings” lo noquea con un puñetazo. Y eso duele Glenn, toda tu reputación a base de gim (de gimnasio, no de Gin Tonic), echada a perder. Malditos tiempos de Millennials. ¡Maldito Youtube!

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“Su visual es muy parecido al de una película porno y sus actrices son como un ejército de trash models salido de un club de alterne de Europa del Este“

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Son muchas las hazañas que podría contar de Danzig, como el videoclip que le dirigió Anton Corbijn (Dirty Black Summer), sus colaboraciones con Johnny Cash o Roy Orbison, la canción escrita por él (Attitude) que versionaron los “Guns N´ Roses” en The Spaghetti Incident, o su cameo en la película "La Profecía II" haciendo de ángel caído (todo un visionario). Pero me estoy desviando de la faceta que realmente importa al hablar de esta película, la faceta de Danzig como editor de cómics, otra de sus grandes pasiones.

En los años 90 Glenn Danzig editó una serie de cómics titulados "Verotika", escritos por él junto a otros guionistas e ilustrados con talento por Simon Bisley. ¿El tema? Pues a estas alturas ya es fácil adivinar lo que más le pone: Sexo, Violencia y Ocultismo (así, con mayúsculas). Hace años se habló de que se estaba preparando una película de animación basada en estas historias, lo que probablemente hubiese sido mucho mejor, pero finalmente el producto resultante es el que estamos comentando, "Verotika" en carne y hueso. Su visual es muy parecido al de una película porno y sus actrices son como un ejército de "trash models" salido de un club de alterne de Europa del Este (ya se hizo hace años una película porno titulada “Grub Girl” basada en un personaje de estos cómics).

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“Las tres historias acaban de forma brusca y me dejan con la sensación de que no me han contado nada”

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“Verotika” se divide en tres historias y el hilo conductor entre ellas lo lleva el personaje de Morella, una joven interpretada por la actriz porno Kayden Kross, que sin duda es la más profesional de la película. Los títulos de las historias son los que siguen: 1) "The Albino Spider of Dajette". La de la chica con ojos en los pezones y un hombre araña blanco que asesina prostitutas; 2) "Change of Face". Donde una misteriosa chica de striptease baila con la cara tapada y cuando no está bailando va por ahí robando caras de bellas mujeres; Y 3) "Drukija Contessa of Blood". Sobre una Condesa a la que le gusta tomar frecuentes baños con la sangre de hermosas doncellas (todo un desperdicio).

Las tres historias acaban de forma brusca y me dejan con la sensación de que no me han contado nada. ¿El guion? "Para qué, si la productora es mía" se respondía Danzig a sí mismo cuando le asaltaba alguna duda. Supongo que la gran baza con la que se relamía en su cabeza era la ingeniería visual con la que vislumbraba su obra en sueños, pero desafortunadamente, la fotografía en esta película es inexistente y técnicamente el trabajo es nefasto. La edición y el montaje son una locura, sin duda se debería estudiar y analizar en las escuelas de cine, y las actuaciones son bochornosas. ¿Estamos ante la que será una película de culto? Yo más bien diría que estamos ante una película hecha con el culo. Quizás acabe teniendo cierto éxito en sesiones golfas a las que van pandillas a reírse de lo mala que es, pero poco más que eso. Le doy bastantes más posibilidades a convertirse en objeto de culto a los cómics editados por Verotik.

Pero pese a la mala acogida de esta película, Danzig no se doblega fácilmente (recordad que supo sobreponerse tras el bochornoso episodio del puñetazo), y ya está preparando su nueva película. Ojito, “Será un Spaguetti Western con vampiros, siempre me gustó Sergio Leone”, dijo Danzig sobre una alfombra roja en la premier de “3 From Hell” en Los Ángeles. Pues nada, habrá que estar alerta.

Lo mejor: Hay que tomársela con humor. No podemos tomarnos esta película en serio.

Lo peor: Que Danzig ya esté preparando su siguiente película. Y, por si fuera poco, este mismo mes publica su disco “Danzig Sings Elvis”. No tengo dudas, todo esto forma parte del plan de Danzig para vengarse del mundo.