Crítica: Savageland

ARTORIUS NOS HABLA SOBRE EL FALSO DOCUMENTAL QUE NOS ACERCA AL TERRIBLE CRIMEN MASIVO OCURRIDO EN LA FRONTERA ENTRE EEUU Y MÉXICO

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Hay gente que fuma.  Otros, comen en Mcdonalds. Y los hay que beben bebidas espirituosas. Yo veo pelis de metraje encontrado y falsos documentales. Filia reciente, me da igual que sean una chusta tremenda, o que resuman los momentos de terror en movimientos frenéticos de cámara para que no se note que no hay un euro disponible: Yo, como en el caso de las películas de monstruos, me las trago todas.  

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“aunque no explica el origen del terror en sí deja la puerta lo bastante entreabierta como para que te imagines lo peor, pero sin tomar por imbécil al espectador” 

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(Interrumpimos la conexión para entrevistar brevemente a Rayba, artista brillante, esposa de Art0rius y mujer sin pelos en la lengua,  para que confirme que el último comentario no es ningún tipo de alegoría sobre la sexualidad del citado crítico:  

Rayba: ¿Es una pregunta con trampa…? 

¡Gracias Rayba! Devolvemos la conexión a los estudios centrales). 

¿Por dónde iba? Ah, sí, metraje encontrado.  

El caso que nos ocupa hoy es una de esas películas que vi con expectativa nula. No me la quise spoilear de ninguna manera, ni leerme ningún análisis previo, porque por muy mala que sean estas películas cuando tocan el género de terror, la emoción del efecto “tren de la bruja” me sobra y me basta para este tipo de propuestas. Y a fe que esta lo tiene, pero aparte con dos extra: que me da la impresión de que está hermanada con la mismísima "Swamp Thing" y su universo DC, al menos tangencialmente, punto uno. Y punto dos, que aunque no explica el origen del terror en sí deja la puerta lo bastante entreabierta como para que te imagines lo peor, pero sin tomar por imbécil al espectador. Lo cual, en materia de género, caer en la tentación de no sobre explicar el terror es señal de buen cineasta, pero al lío. 

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“No esperen violencia gráfica, ni siquiera directa, porque no la hay. Esta película esta rodada como si fuera un documental true crime de esos que tanto abundan últimamente” 

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“Savageland” (2015) es un falso documental sobre un terrible crimen masivo acontecido en la frontera entre EEUU y México, donde toda la población de un pequeño pueblo pierde la vida de forma horrible en una sola noche. El único superviviente es Salazar, un inmigrante ilegal mexicano, encontrado en estado de shock y, en una decisión motivada más por el racismo que por las pruebas, (el nombre de savageland de la zona es dado por los lugareños por la cantidad de inmigrantes que hay en la zona), es condenado a muerte y declarado culpable de todos los asesinatos. Pero hay demasiadas cosas que no cuadran, sobre todo cuando sale a la luz un carrete de fotos realizadas el día de la masacre. 

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“esa enfermiza sensación de que algo malo, muy malo, se está cociendo a medida que la película va avanzando y llega a su final” 

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No esperen violencia gráfica, ni siquiera directa, porque no la hay. Esta película esta rodada como si fuera un documental true crime de esos que tanto abundan últimamente, a través de testimonios, familiares de los expertos, y investigadores que intentan descubrir que ocurrió realmente el 2 de Junio de 2011 en el pueblo de Sangre de Cristo. ¿Mató Salazar él solo a medio centenar de personas en unas pocas horas? Las fotos revelan una historia completamente demencial que indica lo contrario, y es en esas fotos mal enfocadas donde se insinúa el terror de lo que ocurrió aquella noche. Y sí, no dejan de ser un trabajo de photoshop tirando a burdo. Pero la película tiene un ritmo brillante dentro de su género que hace que la trama pase en un suspiro, las interpretaciones son creíbles y, pese a que como digo no hay violencia explícita, es más lo que se sugiere que lo que se muestra lo que consigue capturar al escurridizo sentimiento del miedo en el espectador, y eso no es poca cosa.  

He mencionado el toque DC en esta modestísima producción, y es que uno de los actores se trata del mismísimo Len Wein, guionista de "La Cosa del Pantano" ("Swamp Thing"), cuya presencia me dejó viendo luces. Y es que todo en “Savageland” podría ser perfectamente el prólogo de un episodio de John Constantine o el titan del Verde, incluyendo esa enfermiza sensación de que algo malo, muy malo, se está cociendo a medida que la película va avanzando y llega a su final. ¿Pobreza de medios? Mucha, no nos engañemos. ¿Buen ritmo, sentido del rodaje, interpretaciones decentes bien filmadas y un misterio con el bastante cuerpo como para dejar poso en el que se anime a visionarla? Todo.  

Lo mejor: El sentido del Ritmo. Si eres aficionado a los true crimes, este es tu mockumentary. La historia que sugiere y la puerta que deja abierta. Podría ser perfectamente una precuela de muchas películas de género. Interpretaciones correctas. Lo que sucedió en el pueblo de Sangre de Cristo. Aquí hay directores/guionistas (son 3, compartiendo funciones) a seguir. La crítica social que transpira la película sobre el Sueño Americano. Las 3 últimas fotos del carrete maldito. 

Lo peor: La pobreza de medios. Si no te gusta el subgénero, puede que no conectes con ella.