Crítica: Bedevilled

“En esta calurosa noche de verano, Nido de Cuervos tiene el placer de presentar en sociedad al amigo Lestat, quien a partir de ahora colaborará con nosotros de forma habitual. Él mismo nos  comentaba que no tenía experiencia previa en estos menesteres, pero que diablos, yo mismo, que ahora he conseguido encadenar con cierto sentido dos frases seguidas, siento auténticos sudores fríos cuando le pego un repaso a alguna de mis viejas críticas… la experiencia se gana con el tiempo, y en este sentido, estamos seguros que este inmortal  libertino irá creciendo con cada nueva crítica, y con el, nosotros. Aquí tenéis su desvirgue como cuervo criticón, nada más y nada menos que la coreana “Bedevilled”. Bienvenido Lestat y que ustedes lo disfruten.”

El cine coreano es uno que nunca deja de sorprenderme con sus producciones, tanto dentro del género de terror como en otros. Generalmente sus actuaciones son buenísimas y sus guiones logran enganchar. Como evidencia de esto, cabe destacar la película The Host (dirigida por Bong Joon-ho), la cual logra captivar con su historia, su originalidad en visuales y las excelentes actuaciones de sus personajes principales; razones por la que ha sido premiada en diferentes festivales de cine. “Bedevilled”, dirigida por el debutante Chul-soo Jang a partir de un guión de Kwang-young Choi, logra situarse entre sus hermanas y cumplir con estas características que distinguen a las buenas películas coreanas.

“Bedevilled” nos muestra la vida de Hae-won (Seong-won Ji) en el momento en que esta empieza a complicarse. Luego de tener varios problemas en su trabajo y ya cuando se torna hostil con sus compañeras, su jefe la obliga a tomarse unas vacaciones. Hae-won decide entonces irse a la isla de Moodoo, donde vivían sus abuelos y donde todavía reside su amiga de la infancia Kim Bok-nam (Yeong-hie Seo). Durante su estadía en la isla puede ver lo mal que lo pasa Bok-nam, quien es explotada con arduo trabajo y sexualmente por su esposo Man-Jong (Jeong-hak Park). El resto de los habitantes de la isla son familiares de Kim Bok-nam, pero la tratan tan mal como su esposo, a excepción de su pequeña hija.

Si buscas una película de horror, esta no será de tus favoritas. Las primeras dos terceras partes de la película parecen más una película de drama que otra cosa. No es hasta que la hija de Kim Bok-nam es asesinada accidentalmente por su esposo que en la película empieza a correr la sangre, y pasa de ser un drama a un slasher de manual. Bok-nam se afecta por la muerte de su hija y comienza a matar a todos los habitantes de la isla que abusaron de alguna forma de ella. Vamos, entre que su esposo y sus amigos abusaban sexualmente de ella y sus tías y su abuela la obligaban a trabajar en exceso e ignoraban todo lo que su esposo le hacía, la isla queda bastante desierta.

Esta película no destaca por tener un elenco renombrado entre sus actores, a excepción de Yeong-hie Seo, que ha participado en varias producciones en Corea, aunque ninguna muy famosa, del resto, la mayoría son principiantes. Pero que esto no te engañe, el trabajo que hacen todos es buenísimo. Siendo el primer trabajo del director Chul-soo Jang, es impresionante lo bien que domina la situación. Me gusto mucho por ejemplo, como usa el paisaje de la isla a su favor como elemento estético, que funciona especialmente cuando comienzan las matanzas, dando un efecto de belleza morbosa. Entre las buenas actuaciones, lo creíble que resulta el maquillaje y la atmósfera que consiguen, logran adentrarte en la historia.

Aunque la película tarda en mostrar la sangre y la historia no es lo más original que he visto, la fórmula realmente funciona. No sé si es porque siempre me han gustado mucho las películas coreanas, pero la historia me engancho desde el principio, y ya cuando pensaba que me habían colado un dramita comenzó la acción de verdad. Las actuaciones fueron fenomenales, sobre todo considerando que la mayoría no son actores reconocidos y los giros de la película, aunque un tanto predecibles, funcionan de maravilla, al igual que el final. Esperemos que los futuros trabajos de Chul-soo Jang y Kwang-young Choi sigan por este buen camino y nos ofrezcan trabajos de la calidad de “Bedevilled”.