Crítica: The Final

"The Final" es el título de otra de las películas que han formado parte del "Horrorfest" de este año y que nos llega de la mano de otro debutante (menudo año de desvirgamientos llevamos), Joey Stewart, quien nos propone una historia que se sale un poco del imaginario habitual de zombies, fantasmas o criaturas infernales para centrarse en un terror mucho mas cercano, un terror que sin duda conocemos bien muchos de nosotros, pues quien mas o quien menos, hemos tenido que lidiar en nuestra adolescencia con la situación que se nos plantea en la película.

La cinta de Stewart nos transporta a aquellos maravillosos años donde levantarse cada mañana para ir al instituto se convertía en el particular infierno cotidiano de unos pocos "elegidos", los cuales tenían que soportar el acoso del clásico abusón de colegio, ese personaje a quien su propia inseguridad y una mas que dudosa capacidad intelectual ha convertido en la pesadilla de aquellos estudiantes mas débiles o de aquellos que simplemente son diferentes al resto del rebaño (recuerdo a un par de cabronazos que siempre me estaban jodiendo cuando era un chaval, quien los pillara ahora...).

"The Final" retrata esta situación muy fielmente, se nota que al amigo Joey Stewart le putearon de lo lindo en sus años mozos, y esto se refleja en las carnes de los personajes creados para la ocasión, un grupo de estudiantes marginados, los cuales, hartos de soportar durante años las humillaciones por parte de una serie de alumnos, deciden llevar a cabo un maquiavélico plan con el que vengarse de sus acosadores. Para ello, los invitan a una fiesta de disfraces en un caserón alejado de la ciudad, donde después de drogarlos y encadenarlos, se preparan para hacerles pagar por sus pecados en una larga noche de dolor.

La idea de la que parte "The Final" me parece muy divertida y además de lo mas oportuna, de hecho era bastante extraño que a estas alturas de la vida, no se hubiera llevado aun a la pantalla un tema tan de actualidad como es el del acoso escolar, y no me refiero a esa delincuencia juvenil a la americana que hemos visto en películas como "El Rector" (ni que decir tiene que soy un enamorado de las desventuras de James Belushi), Tom Berenger y su "El Sustituto" o "Mentes Peligrosas" con la sensual maestra Michelle Pfeiffer. Me refiero a algo mucho mas cotidiano, algo que experimentan miles de jóvenes a diario. Y esta es la mejor virtud de la cinta, su capacidad para que nos impliquemos en la historia y odiemos a cada uno de los abusones que aparecen en el filme. Esto consigue algo que no suele ocurrir en el cine de terror, que el espectador se ponga del lado de los "malos", si entendemos como tales a los torturadores físicos de la historia, auténticas víctimas de la misma.

Por desgracia todas las buenas maneras que apunta "The Final" en sus inicios, se van desinflando a medida que se desarrolla la trama, y lejos de ofrecer esa venganza atroz y sádica que todos esperábamos ver, se queda a medio camino, con lo que nos tendremos que conformar con un ejercicio de "torture-porn" bastante descafeinado que hizo que me viniese a la cabeza otra de esos dichos populares que tanto me gusta utilizar, aquel de "Por la boca muere el pez". Y es que "The Final" es una constante bravuconada que nunca llega a destino, perdiéndose en un sinfín de divagantes y previsibles diálogos que lo único que consiguen es ralentizar demasiado la acción y privarnos de lo que realmente queremos ver, sangre.

En este sentido, "The Final" resulta terriblemente decepcionante, pues todas las torturas que se llevan a cabo, carecen de originalidad y tampoco se puede decir que resulten demasiado vistosas, mas bien todo lo contrario, pues los efectos especiales no son precisamente para tirar cohetes y la trampa y cartón se ve en mas de una ocasión. Esto, combinado con la escasez de secuencias, que si bien en un principio, parece que van a ser abundantes y personalizadas a cada una de las víctimas, pronto nos daremos cuenta que el exceso de diálogos hace inviable esta posibilidad, consumiendo demasiado metraje y claro, luego llegan las prisas, abocando a la cinta a un final muy precipitado que se deja demasiadas cosas en el tintero.

Conclusión, "The Final" es una propuesta interesante en el sentido que trata un tema de rabiosa actualidad, el cual recrea de forma fiel y que además consigue construir unos personajes creíbles y fácilmente identificables. El problema viene a la hora de plasmar todo esto en una película de terror, es aquí donde se derrumba estrepitosamente, pues no consigue definir bien ninguno de los dos bandos, pues resulta poco verosímil ver a los "marginados" convertidos en frías máquinas de matar y a los abusadores en inocentes corderitos asustados, el cambio de papeles es demasiado brusco como para tomárselo en serio. Si a esto le sumamos una densidad de diálogos innecesaria para un filme de este tipo y unas secuencias de tortura tan simples como poco vistosas, tenemos como resultado una película que a grandes rasgos se deja ver y que sin duda puede hacer revivir en el espectador los fantasmas del pasado, pero que no explota ni por asomo todo el potencial que se le presumía, donde la torpe narrativa y la rácana puesta en escena turbian en exceso el descafeinado resultado final.