En el año 2001, los amigos de universidad y ahora cineastas Lucky McKee (“May, ¿Quieres ser mi amigo?” y “The Woman”, vistas ambas en Sitges) y Chris Sivertson (“Sé quién me mató”) se unieron para hacer su debut como directores con un film de terror titulado “All Cheerleaders Die”. Doce años después, estos mismos cineastas revisan el material de entonces para afrontar un proyecto armado con un presupuesto superior y la experiencia cinematográfica adquirida con los años.
“All Cheerleaders Die” (2013) narra como Maddy Killian (Caitlin Stasey), una joven rebelde de 17 años (medio paria social de instituto), documenta el equipo de cheerleaders del instituto Blackfoot, especialmente su ex amiga y líder de las animadoras. Pero cuando ésta muere en un accidente durante el rodaje, un conjunto de circunstancias conducen a Maddy a realizar una audición para formar parte del equipo con misteriosos motivos ocultos.
Su ex-novia, Leena (Sianoa Smit-McPhee), todavía está obsesionada con Maddy, celosa de que ella ahora se unió a las animadoras y que ha cambiado radicalmente de imagen, codeándose con Tracy (Brooke Butler), la nueva líder de las animadoras. Parece ser que la joven tiene la intención de hacer daño a Terry Stankus (Tom Williamson), el capitán del equipo de futbol americano del instituto, a través de cortejar a su novia Tracy. Las cosas toman un giro trágico. De forma inesperada y tras un accidente de tráfico, un fenómeno sobrenatural en el que está involucrada Leena cambiará la vida de las animadoras y de los jugadores.
Uno de los mayores atributos de la película parece ser a priori su conjunto actoral. Stasey entusiasma al principio de la película con su carácter desafiante y sus malas intenciones. Como principal antagonista, el personaje de Williamson hace muy correctamente del típico adolescente popular y gilipollas definitivo. Ambos actores dan a cada momento convicción total sin importar lo tonta y melodramática que sea la situación.
El instituto se convierte en un campo de juego peligroso y las hormonas hacen que los adolescentes de secundaria se comporten como locos. Todas estas amenazas se exageran y se combinan para hacer que el último año de instituto sea el más difícil de sobrevivir de todos.
El humor negro impregna la cinta que no va del esfuerzo y la camarería del equipo de futbol americano del instituto, ni de las puñaladas traperas entre la animadoras, ni de los conflictos en general de los adolescentes en su paso a la madurez. “All Cheerleaders Die” pone por medio un fenómeno sobrenatural y ese es su atractivo como película de cine fantástico.
Después de un comienzo prometedor con el cambio espectacular, radical y sospechoso de imagen de Maddy, vienen muertes prematuras, y Maddy y su desesperada ex-novia Leena liandola. Entonces la película se convierte en una guerra de sexos llena de malos diálogos y antiguas travesuras típicas de películas de adolescentes.
Sin embargo , el film está lleno de muchas ideas y conceptos relativamente creativos . Por ejemplo, todas las animadoras están conectadas por gemas sobrenaturales en sus cuerpos, y cuando una de ellas está herida, lo sienten las demás y las diferentes gemas de colores se iluminan. Por desgracia, sin gastar tiempo real en la mitología de estas joyas, este truco se siente demasiado ridículo para ser tomado en serio.
Una de las gracias de la película son los efectos especiales del gurú Robert Kurtzman, que es capaz de sorprender con eficacia a los espectadores con algunas jugadas a balón parado espeluznantes que incluyen retorcidos apuñalamientos. Estos momentos son muy bienvenidos a pesar de que no son tan espectaculares como deberían ser.
Al final, “All Cheerleaders Die” es una entusiasta película que no se atreve a desarrollarse eficazmente y que mantiene la historia rodando locamente.
Si bien puede ser inútil preguntarse por qué después de todo este tiempo McKee y Sivertson han decidido regresar a su primera colaboración para inspirarse en su nueva película, podemos decir que los realizadores parecen disfrutar mucho de su trabajo juntos. Lastima que eso no sea suficiente para que el resultado final de “All Cheerleaders Die” fuera brillante o, como mínimo, entretenido.
LO MEJOR: Las expectativas que crea. Al comienzo de la película parece que vamos a ver algo realmente bueno.
LO PEOR: Su guion plagado de diálogos de guionista primerizo.
9 comentarios:
Vaya…que lastima con lo que me gusta el cine de McKee!!! "The Woman" me pareció muy interesante al igual que la excelente "May"…pero esta tenía ganas de verla….:(
A mi The Woman me flipó, pero todo lo demás que he visto de McKee, me ha parecido bastante mediocre, incluida la popular May, que a mi, ni fu ni fa. De todas formas, esta no tiene mala pinta del todo, yo espero que lo de The Woman no fuera solo una sonada de flauta y pienso darle el beneficio de la duda, aunque la crítica no desprenda optimismo precisamente.
Saludos.
Eh! Qué estoy aquí, Rec!
The Woman me pareció espectacular y a mi May me encanta, por ese rollo creepy que tiene la cinta. Da miedito que haya gente que esté tan mal de la sesera.
Esta cinta no se si la veré o no, porque la crítica; no sé si la he leído muy rápido o qué; pero no me he enterado de mucho.
TGW, me refería a la May de McKee, que me parece una película de una sosura tremenda, igual con algún gag sobre porretas habría ganado enteros ;)
Tu por el contrario, me encantas mujer, ya lo sabes :)
Saludos
Ah, vale, yo es que veo la palabra May y me ciego! Porque mi May me gusta mucho!
Gracias, Rectorcito! ^^
Pues vista la nueva película de McKee, comienzo a tener muy claro que lo de The Woman, fue una sonada de flauta soberana.
All Cheerleaders Die es una chorrada mayúscula. Con un guión espantoso, un sentido del humor para adolescente yanqui fumado y además, soporífera como ella sola.
Los que quieran ver a jovencitas vestidas de animadora meneando los pompones, igual disfrutan con esta comedia teenager sobrenatural, el resto... mejor ni se acerque a tamaña pérdida de tiempo.
Saludos.
Te lo dije Rector, te lo dije.
Saludos. :)
Yo siempre he sido muy fan de "May", y "The Woman" me gustó, pero no al nivel de encandilamiento del resto de los mortales. Esto hacía posicionar claramente la balanza de Lucky McKee hacia "directores a seguir la pista", pero menudo patinazo con "All Cheeleaders die"!!!!
Como comentas, tiene un prometedor inicio que provoca la curiosidad del espectador para lo que viene detrás. Lo malo, lo malísimo es precisamente lo que viene detrás: un terror teen con uno de los guiones más bochornosos del año que va de ridiculez en ridiculez sin que el director se ponga ni colorado.
Un desastre que, a todas luces, hace retroceder todos los añitos de gloria que había ganado este sr. Lucky.
Más suerte la próxima vez!!!
Saludos
“Jóvenes y brujas” es mucho mejor, está es prácticamente un bodrio.
Saludos.
Publicar un comentario
¿Tienes opinión? No seas tímido/a y compártela, pues en la diversidad está el gusto. Eso sí, intentemos no destriparle la película a nadie y avisa de SPOILERS al resto de lectores/as siempre que tu comentario los contenga. De no ser así, este será eliminado. Gracias.