miércoles, 24 de octubre de 2018

Crítica: Freaks

Dícese del freak, a la persona extravagante, rara o fanática. Si tenemos que hacer caso a dicha definición, existen tantos potenciales freaks como individuos, pues lo que para unos es normal, para otros puede ser una extravagancia, una rareza o un fanatismo. Es por tanto este, uno de esos términos tan idiotas y tan nuestros que hemos acuñado en una más de nuestra larga lista de idioteces y en esa incapacidad marca de la casa, de no entender (y en muchos casos, no aceptar), todo aquello que se sale de lo que nosotros mismos entendemos por “normalidad”, sin darnos cuenta de que es precisamente la diversidad, la que sin duda sea una de nuestras más destacables cualidades como especie. Lástima, como digo, que la estupidez aun lo sea más.


“La principal cualidad de Freaks, es la inesperada naturalidad con la que es capaz de engañar al espectador para que este menee el culo hacia el lugar deseado en todo momento”


Los anglosajones utilizan el término freak de forma despectiva para referirse a algo grotesco, a un monstruo. En clave de cine, hablar de “Freaks” es hablar del título de culto dirigido por Tod Browning en 1937 y es hacerlo también, de la nueva película dirigida a cuatro manos por Zach Lipovsky y Adam B. Stein. El primero, con cierto bagaje ya dentro del mundillo, tanto en labores de producción (“Afflicted”) como detrás de las cámaras (“Dead Rising: Watch Tower”, “Leprechaun: Origins”). El segundo, directamente venido del mundo del cortometraje y de la televisión de segunda. Juntos escriben y dirigen esta pequeña cinta titulada “Freaks” que vuelve a poner de manifiesto que el dinero y los medios no son tan importantes cuando se suplen con algo de ingenio y lo más importante, amor por el género.

La principal cualidad de “Freaks”, es la inesperada naturalidad con la que es capaz de engañar al espectador para que este menee el culo hacia el lugar deseado en todo momento y hacerlo además, sin levantar la menor sospecha de este. Por ello, el visionado de la película es un viaje guiado hacia el corazón mismo de la intolerancia y la falta de empatía con todo aquello que difiere de nosotros y de nuestras propias creencias. Un discurso muy actual si nos damos una vuelta rápida por las redes sociales bajo responsabilidad propia, para ver como el insulto y el intento de desacreditación de todo aquel que no piensa como uno, están a la orden del día. Es un ejemplo, hay muchos más. Solo hace falta encender la caja tonta y dejarse follar el cerebro un rato.


“unos exteriores en los que los aires de telefilme ponen bastante de manifiesto el porqué buena parte del filme está rodado en agradecidos interiores”


La primera gran hazaña de “Freaks” es hacernos creer que esta película ya la hemos visto antes. Yo me lo creí, claro que yo soy bastante idiota. Daré por hecho que sois casi tan idiotas como yo, y os diré que a vuestro follado cerebro vendrán títulos como “Las Tinieblas” (Daniel Castro Zimbrón, 2016), “Hidden” (The Duffer Brothers, 2015) o la tan ansiada y posteriormente defenestrada “Llega de Noche” (“It Comes at Night”, Trey Edward Shults, 2017), una fórmula bastante exprimida ya el cine de terror estos últimos años donde se juega con la inocencia infantil como principal herramienta sobre la cual construir el relato de turno.

Temática de lo más oportuna por el hecho de desarrollarse en un único escenario cerrado que no requiere de grandes medios, medios de los que el filme, evidentemente no dispone. Esta primera toma de contacto y posterior desarrollo, generan el deseado caldo de cultivo para que el espectador baje la guardia y se crea por encima de la situación, prepotencia de cartón piedra que los Lipovsky y y Stein no tardarán en pasarse por el forro de los cojones cuando abran la puerta de par en par y se disipen buena parte de los fantasmas, aprovechando ya de paso el desconcierto y cacao mental del respetable, para colarnos la parte más floja de la función, con unos exteriores en los que los aires de telefilme ponen bastante de manifiesto el porqué buena parte del filme está rodado en agradecidos interiores y en la cual, todo parece apuntar que a la broma ya se le ha terminado la cuerda.


“Freaks está muy lejos de las grandes películas que se han podido ver en el Sitges de este año, pero de largo es, una de las que más me han sorprendido para bien”


Nada más lejos de la realidad, ya que lo mejor nos lo depara su último tercio. Simpático e inesperado cambio de latitud que pone en el haber de la película una ambición inapreciable hasta ese momento. Nuevo ritmo, nuevas mecánicas y nuevas situaciones, para darle frescura a una cinta que a esas alturas parecía ya muerta y enterrada, en la que los Emile Hirsch (quien parece arrancado directamente de la costilla de Jack Black), el veterano y dos veces nominado a los Oscars Bruce Dern (“Los Odiosos Ocho”) y la pequeña actriz protagonista de la historia de siete años Lexy Kolker, se ponen la capa de superhéroes para rescatar a la audiencia.

“Freaks” está muy lejos de las grandes películas que se han podido ver en el Sitges de este año, pero de largo es, una de las que más me han sorprendido para bien. En estos tiempos donde se lleva lo bombástico, grandes superproducciones millonarias por un lado, películas mediocres vendidas a bombo y platillo como divinas salvadoras de un género supuestamente en horas bajas (que diría el enano gruñón) por el otro, se agradece una película pequeñita, sin excesivas pretensiones ni recursos, pero inteligentemente dirigida, bien interpretada y repleta de pequeñas grandes sorpresas a descubrir. Una pena que se le vean tanto las costuras en su tramo intermedio y que a Grace “Boomer” Park, no nos la terminemos de creer en el rol de villana, losa con la que en ocasiones suelen cargar los buenos actores tras estar expuestos durante periodos prolongados a los efectos de series legendarias. Pero que la estupidez no nos ciegue esta vez, esta es una propuesta que bien merece hora y media de nuestro tiempo.

Lo mejor: Lo bien que administra los limitados recursos y una capacidad, la de sorprender en el cine moderno, que no se ve todos los días.

Lo peor: En su tramo intermedio acusa una considerable bajada de ritmo e interés.


7 comentarios:

Missterror dijo...

Comparto tu sorpresa porque yo hubiera visto venir la transformación que sufre la película hacia la mitad, ni de lejos. Supongo que las referencias que mencionas a mí también me jugaron una mala pasada y estaba convencida de que los tiros irían por otro lado.
Se nota que el presupuesto está super ajustado y llegado a cierta parte, no puede hacer una gran despliegue de medios, pero la idea tira para adelante y en conjunto sale airoso, por inesperado y por resultón.
Las dos películas en uno que ofrece, las hemos visto ya en varias ocasiones, pero nunca juntas y eso se tiene que valorar, como tú lo has hecho.

Otra de esas cosas que te pueden pasar en un festival es justamente lo que me pasó con "Freaks", que los "descartes" se conviertan en películas que sorprenden por diferentes motivos y que la satisfacción al terminar la película sea doblemente agradable, una por lo que la película transmite y otra para reafirmar que el sexto sentido falla mucho. En esos fallos, muchas veces están los aciertos.

Saludos.

El Rector dijo...

Missterror, uno nunca sabe lo que se puede encontrar en Sitges entre tanto y tanto título. "Freaks" es la segunda película que más me sorprendió. De la primera hablaremos en breve, jeje...

Saludos.

Donnie dijo...

Es cierto que hacia mitad de la película esta parece que se atasca y/o pierde fuerza pero la verdad es que esta 'freaks' me parece una cinta sencilla y muy simpática. Últimamente me cansan bastante las películas de gente encerrada en una habitación o casa pero creo que esta película sabe ofrecer diversas novedades a lo largo del metraje que hace que me resulte mas fresca que otras a pesar de que no salga Ana Torv.

Aún así me deja un cuerpo extraño, como si esta fuera una adaptación de una novela juvenil de ciencia ficción por lo que me queda un extraño sabor de boca. No digo esto de forma despectiva pero tengo la sensación de que el principio va destinado a un tipo de público y con forme avanza el metraje la edad del público al que va dirigida la película se va rebajando..

Un Saludo!

Donnie

sonichead dijo...

Gran sorpresa, tenía pocas espectativas en los primeros minutos pero mientras avanzaba y jugaba con nuestras frágiles mentes me enganché, la película nos engaño y dió un giro completo. Soy fan a más no poder de las películas de sci-fi independientes, de las que incluso usan la cuarta parte del presupuesto que seguro usó ésta, pero Freaks cumple sobradamente. Mención aparte para la actuación de la niña, sobresaliente.
5 estrellas en creatividad, trama y actuación, 4 estrellas en efectos ( y esto no impide en absoluto quedar con una sonrisa luego de verla :) )

El Rector dijo...

Sonichead, humildad y calidad perfectamente pueden funcionar a modo de sinónimos, si bien no suele ser la regla. "Freaks" tiene bastantes deficiencias derivadas de su naturaleza low cost, pero no cabe duda que sabe enganchar al espectador e incluso sorprenderlo, para terminar por convertirse en una experiencia interesante. Yo me llevé con ella una de las grandes sorpresas de la edición de aquel Sitges.

Molaría ver de que son capaces su realizadores, con algo más de cash. Ojalá tengamos oportunidad de comprobarlo en el futuro.

Saludos.

Guadaña dijo...

Una película comparable a los mejores episodios de "Smallville". Muy buena, sin duda.



El Rector dijo...

Guadaña, pues no sabría decirte, me temo que yo nunca llegué a los "mejores episodios" de "Smallville" :)

Saludos.

Publicar un comentario

¿Tienes opinión? No seas tímido/a y compártela, pues en la diversidad está el gusto. Eso sí, intentemos no destriparle la película a nadie y avisa de SPOILERS al resto de lectores/as siempre que tu comentario los contenga. De no ser así, este será eliminado. Gracias.