domingo, 17 de octubre de 2021

Crítica: Prisoners of the ghostland

MISSTERROR NOS HABLA SOBRE EL RESULTANTE DEL ESPERADO BINOMIO FORMADO POR SION SONO Y NICOLAS CAGE


Prisoners of the ghostland (Sitges 2021)
Dicen que somos prisioneros de nuestros deseos y nada más cerca de la realidad. Doble prisión si uno de tus deseos es volver a conectar con Sion Sono y el otro es meterte una ración de Nicolas Cage en vena. Que nos encierren y tiren la llave al más profundo de los ríos si algún día dejamos de buscar el Santo Grial del cine fantástico. Prisión para todos por pedir mezclas imposibles. 


“Una lástima que todo el despliegue artístico que se ve desde los primeros compases, se vea tan lastrado por un guion tan sumamente flojo y unas promesas de acción que nunca se cumplen” 


Prisoners of the ghostland (Sitges 2021)
Sion Sono nos trae su película anual para renovar el carnet de director prolífico y demostrar que puede ser capaz de lo mejor y de lo peor. Es evidente que con más de medio centenar de películas a su espalda es imposible acertar siempre (de la misma manera que sería también muy raro que fallara siempre) teniendo en cuenta su manera de narrar las historias y dividirlas entre realidad y recuerdo, pero a alguien con el bagaje y la experiencia del señor Sono se le deben exigir unos mínimos que lamentablemente no se cumplen en su última película

Prisoners of the ghostland (Sitges 2021)
“Prisioners of the Ghostland” (2021) se presentaba como un sueño hecho realidad para el cinéfilo de pro al meter en coctelera a un director como Sono, unos protagonistas como Nicolas Cage y Sofia Boutella y una trama que prometía una mezcla explosiva de samuráis, ladrones, señores de la guerra y un rescate en la ciudad de los fantasmas. Sobre el papel, supongo que todo parecía buena idea, pero en la realidad el trazo alucinatorio que suele mostrar Sono se ha visto sustituido por una alarmante falta de firmeza en su dirección. “Prisioners of the Ghostland” es una película en la que parece que no hay nadie al volante, pese a que lo tenía todo para ser una de las grandes películas de este año. Una lástima que todo el despliegue artístico que se ve desde los primeros compases, se vea tan lastrado por un guion tan sumamente flojo y unas promesas de acción que nunca se cumplen

Prisoners of the ghostland (Sitges 2021)
Con la exageración por bandera, “Prisioners of the Ghostland”, nos seduce con unos decorados que muestran en pantalla los sueños húmedos que cualquier aficionado al género tiene cada noche. Los recuerdos apocalípticos de “Mad Max” (George Miller, 1979) o “Escape from New York” (John Carpenter, 1981) y las similitudes de Samurai Town con el lejano Oeste, llevan a pensar que la historia del Héroe que Sono plantea será una orgía de acción y venganza entre sociedades radioactivas condicionadas por la desesperación y el desánimo. Me temo que no es así y que todo se queda en una promesa donde las cartas se juegan entre tres personajes: El Héroe (Nicolás Cage), el Gobernador (Bill Mosley) y Bernice (Sofía Boutella). Lamentablemente ninguno de ellos es capaz de sobrellevar un mal guion que condena a Cage al meme de siempre, demuestra las costuras de Mosley, quien lejos de los Firefly anda como pez fuera del agua y deja a Boutella en un discreto segundo plano, sin espacio suficiente para desarrollar su magnetismo delante de la pantalla


“parece haber caído en la maldición del tijeretazo mal dado o de un montaje sumamente descuidado que hace que las explicaciones que parecen darse no tengan sentido alguno” 


Prisoners of the ghostland (Sitges 2021)
Y de desarrollar va el tema, porque aquí vienen todos los palos en las costillas. La narración está tan mal desarrollada y el guion está tan vacío, que la trascendencia que anuncian los decorados, el vestuario, la fotografía y los personajes, se va al garete en cada decisión y en cada flagrante falta de épica. Lamentablemente “Prisioners of the Ghostland” se queda en una anodina experiencia que el espectador olvidará con facilidad pese a lo majestuosamente que está presentada. 

Prisoners of the ghostland (Sitges 2021)
Junto a este atroz guion, el montaje es otro de los lastres de la película. “Prisioners of the Ghostland” parece haber caído en la maldición del tijeretazo mal dado o de un montaje sumamente descuidado que hace que las explicaciones que parecen darse no tengan sentido alguno y que, pese a que todo lo que pase en pantalla esté pensado para ser divertido, la sensación que se acumula minuto a minuto en el espectador no sea nada positiva. A esto hay que sumarle las malas interpretaciones que se cascan Cage y Mosley para hacer que salgas de contexto totalmente y que ciudades con nombres tan estimulantes como Samurai Town y Ghostland sean tan de cartón piedra, que provoquen indiferencia. Sin tensión en la narrativa, sin grandes coreografías y sin violencia gráfica, solo nos queda el consuelo de que es una película delirante, con unos de los decorados más apabullantes que recuerdo este año y que el meme sigue vivo en forma de testículo. 


“Una propuesta que se aleja de la provocación y que, pese a que lo intente, tampoco anima a una reflexión sobre la redención, la lucha de clases o la opresión de la mujer” 


Prisoners of the ghostland (Sitges 2021)
Lamentablemente, la aventura postapocaliptica de “Prisioners of the Ghostland” se queda muy lejos de sus referencias y nada sale bien parado de ese sin dios de estilos en el que Sono no ha estado nada ubicado. Una propuesta que se aleja de la provocación y que, pese a que lo intente, tampoco anima a una reflexión sobre la redención, la lucha de clases o la opresión de la mujer. Aun así, es un experiencia visual que engancha y que por algún mágico motivo no llega aburrir, por mucha sensación de despropósito que provoque. 

Siendo prisionera de mis pensamientos y mis anhelos, probablemente busco que “Prisioners of the Ghostland” sea mejor de lo que es y por eso el cómputo general hace que apruebe (hay penas de prisión que demuestran que no siempre hay justicia). Siendo objetiva, esta película debería suspender y estar entre las decepciones del año. Una pena que mostrando el despliegue que muestra, sea una de las películas menos carismáticas del panorama fantástico. Veremos si el año que viene, Sion Sono conmuta su pena.


4 comentarios:

Mister Moloko dijo...

Hola

Missterror, entiendo perfectamente el efecto "quiero que me guste" ya que a mi me pasa muchas veces y, en el caso de "Prisoners of the Ghostland" ese deseo era muy fuerte. A veces la decepción nos hace ver las cosas de una determinada manera.
Dicho esto, a mi la película me ha gustado más que a ti y le veo valores. Sinceramente creo que ese Ghostland del título, en el fondo, es una forma de definir y poner en imágenes las filis del realizador que agrupadas en una macedonia que, si bien no es indigesta del todo, tampoco resulta un plato gourmet. Mad max, el western, el cine de samuráis, 1997: rescate en Nueva York y un montón de referencias más que aúna en una historia a la que, en eso te doy la razón, le falta fuste y consistencia.
El tema de las interpretaciones no se hasta que punto son dirigidas intencionadamente. Cage haciendo de Cage (hay momentos que sólo le falta gritar, como en "Snake Eyes": "Soy Ricky Santoro y soy el Rey"), Moseley... francamente tiene mucho culto, pero como actor justito (es lo mismo que me pasa cuando leo críticas negativas sobre la interpretación de Udo Kier en "The Blazing World"... Por favor, estamos hablando de Udo Kier no de Al Pacino)
En fin, la peli tiene momentos que me han atrapado y otros que se me han hecho pesados de puro crípticos. Pero en general, aunque no me ha parecido lo mejor de Sono, ha logrado interesarme. Y la escena del huevo memorable.

Saludos

El Rector dijo...

Missterror, yo tampoco tengo narices para suspenderla, aunque seguramente se lo gane a pulso. A Sono hace tiempo que dejé de encontrarle la gracia. Me gusta su cine "serio", pero cuando se pone en modo Miike a hacer el payaso, no me pasa ni con agua. "Prisoners..." lo tenía todo para ser un peliculón de cuidado, todo, menos el director adecuado. Para colmo, le da un papel a un negado para la interpretación como Moseley... menos mal que a falta de acción, de emoción y de épica, están los cuatro chistes baratos de Cage a modo de clavo ardiente. Y por supuesto, una escenografía muy chula. Cogiendo un poco de aquí y un poco de allá, pues se termina dejando ver.

Moloko, pues te diré que a mi Udo Kier me gustó bastante en "The Blazing World". Ojalá fuera ese el problema de la película...

Saludos.

Missterror dijo...

Hola, Mr. Moloko. Efectivamente, creo que a ti te ha gustado más que a mí. Unos días después sigue dándome rabia que toda esa macedonia de la que hablas me hay parecido tan insípida porque, créeme que todos esos ingredientes por separado me flipan.
Entiendo que las interpretaciones estaban dirigidas para resultar exageradas, histriónicas y caricaturescas, pero hasta para eso tiene que haber alguien que coordine que no se traspase la fina línea de todo lo anterior y la mala interpretación. En este caso, ese coordinador es Sion Sono y desde mi punto de vista, no ha estado nada fino.
Me alegra leer tu opinión y ver que no todo el mundo ha salido tan decepcionado de la experiencia. A mí ni la escena del huevo me dijo gran cosa :(

Rector, bienvenido al club de los cobardes!! Realmente lo analizas bien y sí, es un suspenso , pero hay tantos elementos que podrían salvar todo este mejunje que uno ya duda de todo...
Respecto a Moseley, yo no soy tan hater como tú. Desde mi punto de vista, el papel de Otis Firefly le venía como anillo al dedo y lo bordó. Desde luego no es un gran actor y en "Prisioners of the Ghostland" está horrible, pero no le llamaría negado.
El aburrimiento de "The Blazing World" no lo hubiera salvado ni Udo Kier haciendo una buena interpretación (que tampoco fue el caso).

Un abrazo a los dos.

Anónimo dijo...

de acuerdo contigo, missterror: para qué explica tanto un tipo que nunca hizo más que presentar, y arreglate, condorito.

quizá el problema esté en que esperemos algo donde la épica no falte. pero pedírselo a un posmoderno rematado -son gente hastiada y a menudo triste, como es triste el consumo irónico- es desear que se equivoque -pero a veces se equivoca y sale why dont you play in hell?

me quedo con los comuneros tirando de las agujas del reloj gigante, para parar el tiempo.
le agradezco la brevedad: "la épica es ponerse las pantuflas invertidas".

rescato, creo que como tú, que me haya hecho recordar otras películas. recuerda un altar, donde hubo un cine. es un documentalista, sono.

abrazos,

f

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