Crítica: Freddy

KRUEGER NOS HABLA SOBRE LA APORTACIÓN DE UN PACO PLAZA EN ESTADO DE GRACIA, AL REVIVAL DE HISTORIAS PARA NO DORMIR

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Sobre el papel, la idea de relanzar el formato de “Historias para no dormir” se antoja una delicia para el aficionado. Tras las gozosas “Películas para no dormir” (2006, Narciso Ibañez Serrador, Enrique Urbizu, Mateo Gil, Paco Plaza, Jaume Balagueró, Álex de la Iglesia), que reunían al quién es quién del fantástico español; nos llega una nueva tentativa de la mano de cuatro de los realizadores más interesantes del actual cine español: Paula Ortiz, Ricardo Cortés, Rodrigo Sorogoyen y repitiendo Paco Plaza. 

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“Plaza da rienda suelta a un sinfín de referencias y a un constante juego para con el espectador en Freddy, para servidor, el mejor capítulo de estas cuatro nueva entregas” 

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De antemano, Sorogoyen y Plaza me parecen los dos cineastas nacionales más potentes de la actualidad: el primero porque un año después me sigue teniendo maravillado con la tremenda (en todos los sentidos) “Antidisturbios” (Rodrigo Sorogoyen, Isabel Peña, 2020) y el segundo porque, paso a paso, está formando una de las carreras más sólidas de nuestro panorama cinematográfico, tras unos comienzos algo dubitativos. Paco Plaza ha conseguido que cada película suya sea mejor que la anterior, a falta de ver esa “La Abuela” (2021) que retrasos mediante se nos ha ido a enero. “Verónica” (2017) daba muestras de una madurez y un salto cualitativo en la puesta en escena, pero es que servidor no estaba preparado para esa obra maestra, que nunca me cansaré de reivindicar, llamada “Quien a Hierro Mata” (2019), en la que el realizador valenciano orquestaba un thriller desgarrador, con un reparto en absoluto estado de gracia (¡qué falta hacía Enric Auquer en el cine!) y con una realización que ofrecía momentos inolvidables, véase aquella danza fantasmagórica en el patio de la cárcel. 

Puestos en antecedentes, considero que tanto “Cuento de Navidad” (2005) como “Freddy” (2020) son las obras más personales del realizador (no es casual que en tiempos Plaza afirmará que su Película para no dormir era su trabajo favorito…); aspecto que no deja de resultar curioso, ya que se trata de sus dos películas más referenciales; pero al mismo tiempo, cada uno de sus planos demuestra lo mucho que se ha divertido Plaza rodándolas, librándose de ese corsé de autor, en el que progresivamente va cayendo. Mientras su colega Balagueró se entrega al cine de evasión puro y duro, en la tremendamente entretenida “Way Down” (2020), Plaza da rienda suelta a un sinfín de referencias y a un constante juego para con el espectador en “Freddy” (2020), para servidor, el mejor capítulo de estas cuatro nueva entregas, además de ser el único que abraza sin remilgos el terror puro y duro. 

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“El enfoque meta-cinematográfico permite a Plaza, y al guionista Alberto Marini, ofrecer el más sentido (y cariñoso) homenaje a la figura de Ibañez Serrador, incluyéndolo directamente en la ficción” 

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Miki Esparbé se convierte en André, actor tirando a nefasto, que ve como tiene todas las papeletas para ser despedido del rodaje de la última obra de Narciso Ibañez Serrador (un camaleónico Carlos Santos, que más que imitar, homenajea), cuando el director decide regalarle un misterioso muñeco, con el objetivo de motivar su interpretación de ventrílocuo. A partir de ese momento, el rodaje comenzará a convertirse en una progresiva pesadilla para André y para todos los implicados… 

El enfoque meta-cinematográfico permite a Plaza, y al guionista Alberto Marini, ofrecer el más sentido (y cariñoso) homenaje a la figura de Ibañez Serrador, incluyéndolo directamente en la ficción, además de desempeñar el papel de detonante de la historia. Freddy es Chicho. Una vez plantadas las semillas de homenaje, comienza el juego para Plaza: escenas similares a “El Resplandor” (Stanley Kubrick, 1980) conviven con paletas cromáticas sacadas de cualquier giallo de Argento. Muñecos malignos y médiums. Asesinatos creativos y humor negro. Bigotes y bailarinas. Y en medio de todo una Adriana Torrebejano que vuelve a aportar luz y carisma a su interpretación. Pocas actrices hoy en día despiertan la simpatía natural de la interprete. 

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“Una gozada de una hora, con buenas interpretaciones y con un director pasándoselo en grande. Demostrando en su escaso metraje, que llegará un día en el que el valenciano sea el homenajeado” 

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No está entre sus mejores obras, pero como divertimiento (el capítulo es eso para el realizador y eso debería ser para nosotros los espectadores) “Freddy” resulta imbatible. Una gozada de una hora, con buenas interpretaciones y con un director pasándoselo en grande. Demostrando en su escaso metraje, que llegará un día en el que el valenciano sea el homenajeado. 

A modo de cierre, valga un sincero recuerdo para Narciso Ibañez Serrador, la figura más importante del cine fantástico español, junto al también añorado Paul Naschy. Sus obras no se encuentran entre mis favoritas y desde luego la mitomanía no se encuentra entre mis filias, pero hoy en día sigo recordando el maravilloso discurso que pronunció en el homenaje que le dedicó el festival Nocturna. En aquella intervención nos recordó a todos los presentes porque amamos el cine de terror por encima de todo. Larga vida al maestro.