MISSTERROR NOS HABLA SOBRE LA SALVAJE ÓPERA PRIMA DE ROB JABBAZ, UNA OPORTUNA ODA A LA VIOLENCIA Y A LOS INSTINTOS MÁS BAJOS DEL SER HUMANO
Se ha hablado largo y tendido sobre lo mucho que nos ha quitado la pandemia, la obligación de reinventar el presente y lo incierto del futuro. A la fuerza, nos hemos hecho expertos en variantes, restricciones y vacunas. Sabemos que ir por libre no es una opción y en parte, hasta los más sociables, nos hemos vuelto más antisociales, buscando una soledad que antes era poco menos que una tortura. La pandemia nos ha afectado a todos de una o de otra manera y, ya sea física o psicológicamente, la cuerda con la que nos ató el virus sigue en la esquina del cuarto oscuro dispuesta a desenrollarse en el momento menos pensado.
“Jabbaz ha buscado dirigir una ópera prima ultragore y lo ha conseguido. The Sadness es una brutalidad épica con momentos realmente duros”
Tomando la experiencia de la pandemia como punto de partida, y consciente de que el nivel de respeto y tolerancia con el prójimo cada vez está en horas más bajas, Rob Jabbaz dirige su primer largometraje con la mirada centrada en el brutal cómic de Gareth Ennis y Jacen Burrows, “Crossed”, echando constantes vistazos de reojo a David Cronenberg y sus “Shivers” y “Rabid” (1975 y 1977 respectivamente) así como al cine de infectados high class tipo “28 days later” (Danny Boyle, 2002). También diría que en “The Sadness” hay mucho de “Hater” la novela de David Moody, cuya publicidad incluía la promesa de una pronta adaptación cinematográfica que nunca llegó (siempre quedará esa leyenda urbana que decía que Guillermo del Toro había comprado los derechos para delegar la dirección de la película en Bayona).
Jabbaz, ni se queda corto, ni mucho menos perezoso y dirige una de las películas más salvajes de infectados y seres despreciables del cine. “The Sadness” se centra única y exclusivamente en la violencia y como tal, no busca remover conciencias, generar debate o señalar las decisiones tomadas en pandemia, simplemente se sirve de nuestro conocimiento adquirido para apalancar su día de furia en un momento en el que no se nos hace raro escuchar a los presidentes del gobierno hablar de restricciones o recesión económica y ver a virólogos avisar de mutaciones descontroladas. Seguimos en pandemia y reconocemos rápidamente todas estas referencias, pero este nunca ha sido el objetivo. Jabbaz ha buscado dirigir una ópera prima ultragore y lo ha conseguido. “The Sadness” es una brutalidad épica con momentos realmente duros y aunque intenta frenarse para no traspasar algunas líneas rojas relativas a una mayor violencia sexual o violencia animal que seguramente el mismo director se impuso, no cabe duda de que esta película es el equivalente visual a la unión del brutal death metal y el black metal. Esto es cine extremo, queridos cuervos.
“esta historia en otras manos hubiera estado regada de humor negro para relajar la tensión, pero Rob Jabbaz la convierte en algo tan oscuro y triste como su título, no solo para impresionar con la violencia, sino también para arrancar de cuajo la esperanza en el ser humano”
Cuando menciono a la “contención” en algunas líneas rojas, no me refiero a que la película no sea incómoda porque lo es, de hecho, en determinados momentos lo es mucho, me refiero a que se nota una cierta templanza en las escenas sexuales, pese a ser el centro de lo que acontece en la trama. Una trama sencilla sin mucha vuelta de hoja, que se centra en el día de la explosión de una nueva variante extremadamente contagiosa de un virus que libera los instintos más primarios y brutales de hombres y mujeres y que hace incontrolables sus deseos de sexo y violencia. “The Sadness” es la historia cafre de una pareja que pasa las primeras horas del estallido separada y cuyo único objetivo es sobrevivir y volver a estar juntos.
Tengo la impresión de que esta historia en otras manos hubiera estado regada de humor negro para relajar la tensión, pero Rob Jabbaz la convierte en algo tan oscuro y triste como su título, no solo para impresionar con la violencia, sino también para arrancar de cuajo la esperanza en el ser humano y hacerla jirones. “The Sadness” es implacable y convierte a unos zombies/infectados de manual en algo mucho más turbio y algo mucho más terrorífico porque estos infectados no pierden en ningún momento su consciencia humana, sus recuerdos y sus pensamientos. Conocen la diferencia entre el bien y el mal, saben lo que hacen y cómo lo hacen, pero simplemente lo disfrutan y lo celebran. En “The Sadness” la premisa es la crueldad y la conclusión es la fortaleza. Todo se resume en ser más fuerte que tu agresor, jugar con las mismas reglas, sonreír al exceso y luchar con mejores armas en una especie de sociedad infernal y caótica donde esquizofrénicamente todos encajan. Esta es está la madre del cordero, porque entre tanta violencia, sangre, muerte y dolor, el virus actúa como secta y provoca que todos los infectados se hermanen y sientan que son más felices que nunca. Así, mientras en pantalla casi todos sonríen, el director está siendo despiadado con el espectador.
“Medalla de oro para unos efectos artesanos increíblemente realistas y efectivos que cargan con todo el peso de la película y medalla de plata para todos y cada uno de los villanos”
Por otra parte, no esperáis un buen desarrollo de los personajes porque ni está, ni importa. Esta película es una oda a la sangre para estómagos curtidos en busca de sensaciones límite que dejan huella. Reconozco que en mi caso fue así y “The Sadness” es del tipo de películas que siempre ansío ver porque, en esta espiral de emociones adversas que me envuelve, este género me concede la posibilidad de vivir experiencias muy intensas sin riesgo. También sé que entrará en la lista de películas que una vez vistas y reconociendo todas sus virtudes cinematográficas, no volveré a ver debido a que me ha afectado de una manera que no he podido controlar. No se trata de las escenas violentas, en mi caso, es la sensación de pesimismo y de genuina tristeza que desprende la película lo que me veta. Afortunadamente esta lista es muy corta y tan atrayente como limitante para mí.
Volviendo a “The Sadness”, en su apartado técnico es imposible no destacar la maravillosa fotografía que tiene un impacto definitivo y certero en el resultado final. Medalla de oro para unos efectos artesanos increíblemente realistas y efectivos que cargan con todo el peso de la película y medalla de plata para todos y cada uno de los villanos (múltiples y variados) que dejan unas cotas de maldad en pantalla que son canela fina. En concreto, quiero resaltar a unos de los personajes más perturbadores de la película, el ejecutivo que persigue incesantemente a la protagonista, interpretado magistralmente por Tzu-Chinag Wang, con el que la cámara tiene un absoluto idilio y en el que encuentra el recurso ideal para encuadrar en primeros planos el rostro del mal. Destacable también la interpretación de Regina Lai (Kat), quien muestra el estupor y el shock de una forma muy creíble, pese a lo increíble de lo que se vive en pantalla.
Con toda esta información, que cada lector haga lo que crea conveniente. En este caso me reservo el derecho de recomendación porque solo lo podría hacer conociendo los gustos específicos del peticionista. Permitidme que, teniendo en cuenta la impresión que me causó, no generalice. Quienes aún no la hayáis visto y corráis a buscarla, hacéis muy bien, es una gran película que no deja indiferente y hay que verla. Quienes optéis por dejarla pasar y explorar otras opciones, hacéis muy bien también, seguramente no es lo que estáis buscando y no la podáis disfrutar. Yo le pongo 8 estrellitas porque se las merece sin duda alguna, pero la guardo con llave en la caja de mis películas malrolleras con huella indeleble. Srđan Spasojević, Hideshi Hino, Kōji Shiraishi y Pasolini seguro que son buena compañía para Rob Jabbaz.
8 comentarios:
Hola a todos
Tengo que reconocerte que me ha encantado tu análisis. Entiendo perfectamente tu planteamiento y las motivaciones por las que no la volverás a ver. Creo que es una película que, más allá de sus excesos, tiene un poso depresivo importante y su final nos deja con un hálito de tristeza considerable.
La película es una versión del cómic “Crossed” a la que le han cambiado el nombre e, imagino, por la que no han pagado derechos. Cualquier lector de los cómics de Garth Ennis o de los números que escribió Alan Moore encontrará enormes concomitancias. Personalmente compre los primeros tomos y deje de seguirla ya que me resultaba reiterativa y la violencia como único recurso narrativo llegó a cansarme. En esta versión, tal como has señalado, han rebajado mucho la parte sexual (imagino que la censura en Taiwán debe ser dura con el tema) lo que causa un efecto raro ya que la violencia es muy explícita y el resto está narrado en off.
La violencia es muy extrema, pero lo que a mí me ha impactado más ha sido, como te ha pasado a ti, ciertos elementos que nos muestran todo aquello que nuestra sociedad sublima o reprime. Aquella máxima de que a muchas personas sólo les hace falta un mal día para estallar, se visualiza en la película. Creo que ese es su punto fuerte, más allá de violencias, gores y sangre. Ese hombre maduro que persigue a la chica por toda la ciudad o esa indescriptible declaración de amor del final (que es, a pesar de los pesares, el reverso retorcido y oscuro del amor incondicional y la dependencia emocional que se puede llegar a sentir por alguien) son momentos que enriquecen la película y le aportan elementos que, para mí, la hacen más interesante y compleja. El que busque violencia y gore lo tendrá; pero creo que detrás de esa mirada superficial hay elementos muy interesantes y descorazonadores, como bien dices, que nos muestran un poco nuestras vergüenzas como sociedad.
Saludos
Maldita sea mi estampa, tengo que verla cuanto antes. En primer lugar porque tú análisis Missterror pone los dientes muy largos y en segundo lugar porque desconocía esa referencia tan obvia a Crossed, cómic que particularmente me encanta y es, desde luego, lo más heavy que he leído en relación a violencia gráfica.
Deseando verla!
Saludos!
Ni un día he podido esperar. Un festival de gore mal rollero sin una pizca de humor, con momentos bastante salvajes, aunque suavizada en las partes referentes al sexo. Si considero algunos bajones de ritmo cuando la violencia pura y dura desaparece de escena, pero cuando está aparece salpica que da gusto. Me encanta cuando el gore tiene como finalidad incomodar y se aleja del enfoque Braindead, cabe señalar el ataque inicial y el momento ocular (totalmente Crossed).Dicho lo cual, para nada me parece una película de zombies, tal y como afirman muchas líneas publicitarias, estás criaturas del averno son otra cosa y llevan aún más allá la máxima de la noche de los muertos vivientes: nosotros somos ellos y ellos son nosotros.
Gratísima sorpresa.
Saludos!
Estupenda reseña Missterror, pero como menciona Mister Moloko, The Sadness no se basa en la realidad del coronavirus SARS-CoV-2, aunque no niego los posibles paralelismos que se puedan realizar, si no que es una pseudo-adaptación de las novelas graficas de Garth Ennis tituladas Crossed. Una de las salvajadas graficas más impresionantes que he visto y disfrutado jamás.
The Sadness tiene un apartado técnico brillantísimo y unas escenas que al pisan el acelerador de lo salvaje, malsano y sangriento son una brutalidad que te aplastan al asiento. No obstante, sabiendo de donde se partía se me ha quedado corta. Desgraciadamente el guion no deja de ser un esbozo de cuatro lineas con algunas situaciones y personajes bastante irrisorios.
The Sadness es una buena película de terror, con unos fx artesanales fantásticos, que merece la pena ser disfrutada/sufrida por todos los aficionados al genero, a los cuales les brindará unas cuantas sacudidas bastante impactantes/placenteras.
Saludos!!!
P.D. Como bien comentáis, en otras manos, sobretodo el guion, podría haber deparado una experiencia perversa, cruel y viciosa absolutamente apoteósica.
La película empieza bien pero se desinfla desde que salen del metro(más o menos la mitad del metraje).
Película correcta y poco más.
Un pasote del primer al último minuto. Venía con la vitola de experiencia salvaje y eso me tiraba un poco para atrás, pues el marketing suele crear en ocasiones, expectativas que nada tienen que ver con la realidad, pero esta vez, y a diferencia de lo que ocurrió con "The Medium", "The Sadness" no iba de farol.
Aunque yo no he encontrado tanto ese mal royo de primer nivel, ese tono ultra pesimista y deprimente tan característico del buen cine de zombies e infectados(aunque como dice Krueger, esto NO es una película de zombies), he de decir que la película es un despiporre de mala leche tal, que es imposible no subirse al barco y disfrutar como un cochino. Un espectáculo visual artesanal de primer orden y un pulso detrás de la cámara el de Rob Jabbaz, que consigue impregnar al filme de una cercanía que pone los pelos de punta, ofreciendo una película de terror mayúscula que pese a sus altas cuotas de gore, en ningún momento cae en el humor negro tan habitual de este tipo de películas tan pasadas de rosca.
Tras la pandemia que nos ha tocado vivir, uno ve con otros ojos este tipo de propuestas, ya no parecen tan descabelladas, viendo el nivel de estupidez y la falta de empatía del personal para con el resto. Al final, "The Sadness" bien podría entenderse como una metáfora de lo que hemos vivido en nuestras propias carnes.
Por buscarle un "pero", pues esas partes sexuales podrían haberse llevado un poco más allá viendo el contexto de la película, pero igual hubiera salido ya algo demasiado enfermo y tampoco era esa la intención.
De cabeza a lo mejor del año.
Saludos.
Hola, Moloko. Ya veo que a ti también te dejó la mente algo revuelta. Supongo que hay veces en los que las tristeza cinematográfica se apodera del espectador como si fuera real y esto es lo que me pasó. Sensación de abatimiento total. Ni en mil página podría escribir lo que resume este párrafo.
Krueger, me alegra que corrieras a verla porque estaba segura de que te iba a parecer una patada en la boca del estómago. Como dices, no es una película de zombies aunque tome muchas características prestadas. Va un paso más allá de las infecciones virulentas incontenibles.
Respecto al bajón de ritmo cuando desaparece la violencia que comentas, yo no lo percibí. En mi opinión, el ritmo se mantiene de maravilla y los pocos momentos libres de violencia actúan como énfasis para las escenas anteriores y posteriores. De hecho, esos momentos sin violencia son demoledores.
Max, sin duda "The Sadness" es la adaptación de "Crossed" de Rob Jabbaz, pero está claro que una película con una temática como esta, rodada en 2021, bebe mucho de la experiencia vivida mundialmente con la pandemia Covid19.
Pese a que la has disfrutado, veo que el guion no te ha convencido. Yo no le pongo demasiada pega y el escaso desarrollo de personajes no creo que desluzca el resultado final. Teniendo en cuenta que toda la película se desarrolla en las horas siguientes al contagio masivo y que no hay flashbacks, no creo que se pudiera haber mejorado mucho la planificación.
En mi caso, creo que "The Sadness" de Rob Jabbaz ya es la experiencia perversa, cruel, viciosa y absolutamente apoteósica que esperaba ;)
Anónimo, pese a que la escena del metro es lo más memorable de la película, creo que cuando salen a la superficie y llegan al hospital se producen los momentos álgidos. En mi caso el interés no disminuyó en ningún momento.
Rector, yo también iba con miedo por mis expectativas. "The Sadness" era obsesión pura desde que oí hablar de ella. En este caso y como bien comentas, no ocurrió como con "The Medium" y las expectativas no fueron malas compañeras.
Todos estamos de acuerdo en que este tipo de películas casan muy bien con el humor negro y que a veces lo piden a gritos para rebajar la angustia en el espectador, pero en "The Sadness" tenía que ser como es, salvaje y triste. En mi caso, agradezco que las escenas sexuales no se llevaran más allá (ya tuve suficiente con el amigo Milos).
Como dices, esta película se ha asegurado el puesto en los tops de finales de año ;)
Gracias a todos por comentar. Un abrazo.
Yo tengo una duda, al final de la película y ya abre la puerta a la azotea y se cierra la puerta mientras pasan en plano al novio se escuchan unos tiros al fondo y lo que parece ser ella gritando o sea que ya no sobrevivió y murió???
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